Medios locales de Camboya en el Sur de Asia revelaron la muerte de al menos 4 personas que resultaron afectados luego de ingerir carne de perro durante dos banquetes celebrados el pasado fin de semana.
De acuerdo al reporte divulgado por los medios, dentro del grupo de personas que participaron en los banquetes, más de treinta de ellos resultaron intoxicadas.
La información indica además, que luego de lo ocurrido se hicieron análisis determinando que el can cocinado había muerto envenenado y tras su consumo la sustancia tóxica pasó al cuerpo de las personas.
De acuerdo al informe de un portavoz policial que ofreció detalles de lo ocurrido al diario "Cambodia Daily", el propietario del animal no estaba enterado de que éste había sido envenenado y en lugar de enterrarlo lo vendió para no desperdiciarlo.
Chea Rath, quien adquirió el perro muerto, invitó el pasado sábado a sus familiares y amigos a una barbacoa con la carne del can en la provincia de Kratie, cerca de la frontera con Vietnam.
Rath, de 66 años, falleció ese mismo día.
Durante su funeral, el domingo, los asistentes volvieron a degustar el asado contaminado, sin que aún se supiera que fue la causa principal de la muerte del anciano.
Las otras víctimas mortales son la nuera del Chea Rath, Proeng Saron, su vecina Bin Naykeng, y una cuarta víctima no identificada por la policía.
En Camboya el consumo de carne de perro, denominada en los establecimientos "carne especial", se tolera y no es ilegal, pero no está tan extendido como en el vecino Vietnam o China.