La señora Berlinesa Franco, esposa del fenecido alcalde Juan de los Santos, llegó al local de la Federación Dominicana de Municipios, donde éste fue ultimado, y la sacaron de allí desmayada.
Berlinesa salió del local llorando, con la cabeza baja y lamentando la muerte de su esposo, cuando, de repente, se desmayó y fue trasladada en una unidad de la Policía Nacional.
Otras personas lloraban de forma desconsolada la muerte del edil, como una señora llamada Juana, a quien señalan como cercana colaboradora.