Al menos 60 personas privadas de libertad fallecieron la madrugada de este jueves en medio de un alegado intento de fuga en el penal de Topo Chico, en la zona metropolitana de la ciudad mexicana de Monterrey al norte de Mexico.
De acuerdo a la información que trabajadores de la cárcel desde el interior del presidio, ofrecieron a EFE, la fuga habría sido organizada por los presos que pertenecen al grupo criminal Los Zetas.
La revelación sobre la tragedia fue hecha en rueda de prensa organizada por las autoridades mexicanas, quienes explicaron que la organización criminal habría reaccionado de esa forma, luego de que se les quitará el control interno que mantenía en el recinto penitenciario.
El motín comenzó la pasada medianoche y la primera versión oficial sobre lo sucedido partió de la cuenta de Twitter de la Coordinación General de Comunicación Social del Gobierno de Nuevo León, del que Monterrey es capital y que tiene frontera con Estados Unidos.
El centro penitenciario amaneció con un fuerte cordón policial mientras se acercaban a sus alrededores decenas de familiares de los internos preocupados por la situación de sus parientes recluidos en el recinto.