Como opresores califica el Papa Francisco a los políticos que se dedican a cometer actos de corrupción, tras asegurar que es cosa de hoy esa práctica llevada a cabo por aquellos que pierden la noción de servicio y se dedican a servirse de manera descarada.
Tras hacer la afirmación Francisco, deploró que los políticos de hoy exploten a las personas con el único objetivo de conseguir dinero y aseguró que de la misma manera en como lo expuso Nabot, en su relato bíblico de víctima de la ambición de poder del rey Ajab, que mencionó en la audiencia general en la Plaza de San Pedro.
El pontífice explicó ante miles de personas reunidas en la plaza vaticana, que la política de los corruptos es registrada por la historia como quienes quieren más y más, y más sin saciarse.
Jorge Bergoglio consideró como vergonzoso que se esclavice a la gente de manera inmisericorde para enriquecer a unos pocos donde el único objetivo es el dinero.
El papa Francisco aludió también a que cuando el poder "pierde la dimensión del servicio (…) se transforma en arrogancia y se convierte en dominio y opresión" y agregó que "sería bonito" que quienes explotan a las personas "se arrepintieran y pidieran perdón al Señor". EFE