El candidato presidencial del Partido Revolucionario Dominicano –PRM-, Luis Rodolfo Abinader, advirtió este lunes que en las próximas elecciones del 15 de mayo está en juego el futuro de República Dominicana.
En un breve discurso de alrededor de diez minutos transmitidos por los canales 11 y 9, precisamente las dos estaciones de TV que hace algunas semanas se negaron a difundir un documental del PRM, Luis Abinader dijo que el 15 de mayo el país se decidirá por la democracia o por la dictadura, en franca alusión a los 12 años consecutivos que lleva en el Gobierno el Partido de La Liberación Dominicana.
Apelando a la vieja técnica del “pódium vacío”, el candidato presidencial del PRM hizo referencia al rechazo del candidato del PLD y Presidente de la República, Danilo Medina, a participar en un debate entre candidatos presidenciales donde cada cual exponga sus planes de gestión.
Tras convocar a un “Gobierno de Unidad Nacional”, Luis Abinader reiteró sus promesas de crear 200 mil empleos por año, duplicar el monto en dinero que reciben los beneficiarios de la tarjeta solidaridad y sumar otras 750 mil mujeres a ese programa de asistencia social.
Agregó que donde quiera que llega puede percibir el deseo de cambio que tiene la gente, y sostuvo que la reelección será derrotada porque el cambio es ahora.
“en todas la provincias, municipios y distritos que visito hay un solo clamor: Tenemos que salir de esta gente, no podemos seguir viviendo en un país en el que unos pocos funcionarios se quedan con todo”, expresó Abinader.
Dijo que no todos los peledeistas son prepotentes y corruptos, y que esos empleados públicos que son del PLD formarían parte de su gestión, porque es su interés hacer un gobierno de todos y para todos.
Luis Abinader rechazó los rumores que según dice se están difundiendo en torno a su candidatura, en una clara respuesta a las versiones oficiosas de que el PRM se retiraría de la contienda antes de las elecciones del 15 de mayo.
Dijo que son rumores que buscan crear dispersión entre sus seguidores, lo que atribuyó a la alegada desesperación de sus opositores.
afirmó que los dominicanos estan en este momento ante la alternativa de permanecer en el actual estado de inequidad social, de indefensión ciudadana, de mentiras, descomposición y corrupción del Estado, o con la fuerza de su voto cambiar esta oscura realidad de injusticias y atropellos, y avanzar en unidad a cambiar el rumbo del país, con un gobierno de unidad nacional.
“El grupo en el poder ha derrochado tanto, y el proyecto reeleccionista ha resultado tan caro, que ha sido el propio candidato a la reelección quien ha dicho que de ganar aplicará más impuestos que te aumentarán el costo de la vida, la comida y la medicina”, dijo.
El candidato presidencial de los partidos Revolucionario Moderno, Reformista, Dominicanos por el Cambio, Humanista Dominicano, Frente Amplio y otros movimientos políticos y sociales advirtió que los ciudadanos honestos reclaman soluciones y respuestas a sus problemas, a la inseguridad, el alto costo de la vida, la corrupción, el desempleo, la falta de medicinas en los hospitales y el endeudamiento desenfrenado.
“Estos son los temas para los cuales el candidato reeleccionista no tiene respuestas y no quiere debatir con el pueblo, y es el motivo por el cual durante toda la campaña él ha estado ausente del debate de ideas”, indicó.
Agregó que los dominicanos y dominicanas de bien, que son la gran mayoría, quieren un cambio, “quieren que lo hagamos unidos y quieren que lo hagamos ahora”.
“Este no es un momento para la indiferencia ni para la abstención. No podemos darle la espalda a nuestro país, porque está en riesgo nuestra democracia, la sostenibilidad financiera, la paz social y el futuro de nuestros hijos”, subrayó.
Abiander concluyó su breve exposición con una frase del general Sánchez Ramírez, donde manifestó “Invoco en este momento dramático de nuestra historia la frase con la cual el general Juan Sánchez Ramírez, conminó a sus tropas al combate, durante la batalla de Palo Hincado: “Pena de la vida al soldado que volviere la cara atrás; pena de la vida al tambor que tocare retirada. Pena de la vida al oficial que lo mandare; aunque sea yo mismo”.