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La muerte del vigilante Bienvenido García durante un asalto a un camión de envío de valores frente a Bella Vista Mall deja seis hijas en la orfandad, cuatro propias y dos adoptadas.
García, junto a su compañero Yervin Eduardo Cuevas, fue sorprendido frente a la plaza Bella Vista Mall, por dos hombres provistos con armas automáticas que traían escondidas dentro de un estuche de guitarra, según señalaron testigos de la tragedia.
García murió en el lugar de los hechos, mientras Cuevas recibió cuatro balazos y lucha por su vida en la Unidad de Cuidados Intensivos del Centro Médico Dominicano.
En el sector Buenos Aires de Herrera están siendo velados los restos de García. Es allí donde le lloran sus hijas y un vecindario consternado por la tragedia.
Su hermano, José García, lo describe como la alegría de la familia, por ser “una persona que siempre estaba presta a ayudar, con una sonrisa en los labios”. Dijo que Bienvenido era un hombre trabajador y muy entregado a su familia.
De su lado, Jaqueline García, una de sus hijas, lo describió como el mejor padre del mundo, el cual deja un vacío enorme en el hogar.
Aseguró que su padre salía de la casa a las 4:00 de la madrugada y regresaba a las 11:00 de la anoche, porque siempre hacía horas extras.
Dijo que se enteró de la muerte de su padre por las redes sociales y que de inmediato llamó a la empresa donde trabajaba para confirmar la información, y al tener la versión oficial, se dirigió a la Policía junto a una de sus hermanas.
En cuanto a la compañía Grupo 4 S, para la que laboraba su padre, dijo que está agradecida, porque hasta el momento le han respondido con lo que han necesitado ante esta situación.
