Final "ideal". Final "soñada". Otra vez cara a cara Roger Federer y Rafael Nadal. Algo impensado a principios de temporada y más de lo que se vio entre los años 2014 y 2016. Tercer "clásico" en solo tres meses.
Se vieron en la final del Abierto de Australia, se vieron en Indian Wells y se volverán a ver este domingo en la final de Key Biscayne. Y todo gracias a que el suizo pudo controlar a Nick Kyrgios en un partido de más de tres horas donde los tiebreaks fueron protagonistas. El 7-6 (9), 6-7 (9) y 7-6 (5) lo dice todo.
La raqueta del australiano solo duró media ovación y acabó hecha trizas contra el suelo. El festejo fue del suizo que espera seguir sonriendo en Miami tal como lo hiciera en 2005 y 2006.
En tanto, Rafael Nadal venció al italiano Fabio Fognini por 6-1 y 7-5 y jugará su quinta final en el Masters 1000 de Miami. El tenista balear no dio opciones a su rival, que sólo pudo lograr 9 puntos con Nadal desde la línea de saque, desde donde fraguó un triunfo que le permitirá buscar su primer título en el torneo estadounidense, uno de los pocos grandes que le faltan.
El italiano pagó además sus 38 errores no forzados, por 12 del español, que volvió a demostrar que este año está en camino de recuperar su mejor nivel. Se viene una final ideal. Una final soñada. Con datos de ESPN