Las autoridades negaron este viernes por la noche que la residencia de Marlin Martínez, en Cenoví, fuera incendiada por personas de esa comunidad de la provincia Duarte, en represalia por la masacre cometida contra la joven Émely Peguero.
Agentes policiales al cuidado de la casa de la imputada en el hecho de sangre, mostraron la casa de Marlin Martínez a los medios de prensa que llegaron hasta el lugar, para desmentir la versión difundida por redes sociales.
Más temprano y a su llegada a la Fiscalía, donde le impusieron tres meses de prisión preventiva, Marlin Martínez fue recibida a pedradas por una multitud apostada en el lugar, con la intención de tomar la justicia en sus manos.