Buenos Aires- La expresidenta argentina y senadora electa Cristina Fernández deberá acudir este jueves a los tribunales para prestar declaración indagatoria en una causa por presuntos delitos de asociación ilícita y lavado de dinero, que tiene en el punto de mira a una empresa vinculada a la familia Kirchner.
La exmandataria (2007-2015) tiene que comparecer ante el juez Julián Ercolini, quien en su resolución del pasado agosto también estableció mantener la inhibición de bienes que pesa sobre ella.
Además, el magistrado llamó a prestar declaración a Máximo y a Florencia Kirchner -hijos de Fernández y del fallecido expresidente Néstor Kirchner (2003-2007)-, al empresario Lázaro Báez y a otros 20 imputados.
La ronda de declaraciones arrancó a principios octubre y concluirá el próximo 20 de diciembre y está enmarcada en la causa que investiga supuestos pagos a los Kirchner por parte de empresarios de obra pública a través de la contratación de instalaciones de un hotel administrado por la firma Hotesur, dedicada al sector inmobiliario y participada por la expresidenta.
El caso se abrió a raíz de una denuncia presentada en noviembre de 2014 por la diputada de centroizquierda Margarita Stolbizer, quien acusó a Fernández y a otros altos cargos de su Gobierno de presuntos delitos de violación de los deberes de funcionario público y abuso de autoridad en la gestión de la empresa.
La legisladora aseguró que el Hotel Alto Calafate, un establecimiento de lujo situado en la villa turística de El Calafate (sur) propiedad de Hotesur, podía ser un alojamiento "fantasma" usado en su momento por el matrimonio Kirchner para supuestos negocios irregulares junto a Báez, detenido desde abril de 2016 en otro caso por presunto lavado de dinero.
En su resolución, Ercolini describió una serie de "maniobras" que, afirmó, "fueron diseñadas y pergeñadas principalmente por Néstor Carlos Kirchner, Cristina Fernández y Lázaro Antonio Báez para lograr otorgarle apariencia lícita al dinero que había sido irregularmente asignado a empresas de propiedad de este último".
La comparecencia de la expresidenta se producirá exactamente dos semanas después de que tuviese que presentarse en los tribunales federales de Buenos Aires como investigada en una causa por supuesto encubrimiento de los iraníes acusados de atentar contra una mutua judía en 1994.
Fernández tiene abiertos tres procesamientos judiciales por hechos ocurridos durante su mandato.
El primero se debió a supuestas irregularidades en contratos de futuros de dólar por parte del Banco Central y los otros dos por presunta asociación ilícita en la concesión de obra pública. EFE