República Dominicana.-Como una forma de prevenir feminicidio los agentes policiales que incurran en la comisión de violencia de género e intrafamiliar también serán despojados de sus armas de reglamento como dispuso esta semana el Ministerio de Defensa para sus miembros.
Así lo afirma el vocero de la institución, coronel Frank Félix Durán Mejía, quien aseguró que la medida es aplicada desde hace mucho tiempo en las filas policiales.
“Nosotros también lo hacemos. A los policías que son acusados de violencia de género o de cualquier naturaleza, lo primero que se hace es desarmarlos. Todos los policías que van a la Dirección Central de Asuntos Internos acusados de lo que sea se desarman automáticamente; ese es un protocolo de nosotros”, dijo Durán Mejía.
Mediante el oficio 3954 de fecha 31 de octubre del año en curso, el Ministerio de Defensa recomendó que se haga el descargo de sus armas de fuego a los militares que cometan las faltas descritas.
La medida se adopta en momentos en que el gobierno puso en marcha el Plan Nacional Contra la Violencia de Género que consta de 22 acciones puntuales a ejecutar. Uno de los protocolos establece que los hospitales deberán informar de forma inmediata a la Fiscalía cuando reciban en los centros a alguna mujer agredida.
Desde el mes de enero hasta octubre de este año se produjeron al menos ocho feminicidios en los que están involucrados policías y militares.
El 30 de octubre pasado, el teniente del Ejército de República Dominicana, Secundino García, de 53 años, ultimó a Mirelis Pérez, de 38, y luego se suicidó en el residencial Carmen Renata III, en el distrito municipal de Pantoja, Santo Domingo Oeste.
El 26 de octubre el sargento mayor de la Armada, Fidel de Paula Amador de la Cruz, de 32 años, mató a su exconcubina Aurelina de León Payano, de 25, y a su suegra Juana Báez de León, de 44, hirió a otras dos personas y se quitó la vida ahorcándose en Yamasá.
En tanto que el 24 de octubre, el sargento mayor de la Policía, Víctor Antonio Checo Cornelio, de 38 años, mató a su concubina Esperanza Polo Pierre, también de 38 y luego se suicidó en San Pedro de Macorís.