VILLA TAPIA, RD.-Con una misa celebrada en la parroquia San Rafael de Villa Tapia, y un acto en el museo de las hermanas Mirabal en Salcedo, fue recordado este sábado el 57 aniversario del asesinato de Patria, Minerva y María Teresa Mirabal, por la tiranía trujillista en 1960.
En la misa, el reverendo Isaac de la Cruz, vice-rector de la Universidad Católica Nordestana en representación del obispo de San Francisco de Macorís, resaltó el legado dejado por las heroínas de Ojo de Agua a favor de la libertad y la paz de la República Dominicana.
“Este día es memorable e histórico, incluso tomado para celebrar a nivel internacional la no violencia contra las mujeres”, subrayó el sacerdote de la Cruz.
Indicó que es lamentable seguir viendo cómo diariamente son asesinadas mujeres no solo en la República Dominicana, sino en otras naciones del mundo.
Dijo esperar que no haya más muertes violentas en el país y que mejore la formación de los ciudadanos.
Posteriormente, un batallón mixto del Ejército Nacional de la República Dominicana y la Armada Dominicana, rindieron los honores militares correspondientes frente a la parroquia, donde fue interpretado el Himno Nacional y se realizó un desfile militar hasta la explanada de la feria dedicada a las Hermanas Mirabal y que concluye este domingo 26 de los corrientes.
En tanto que en la casa-museo de las hermanas Mirabal, se realizó el homenaje que tradicionalmente se realiza a las heroínas, consistente en el depósito de ofrendas florales en el mausoleo donde reposan sus restos.
Las palabras de bienvenida a esta actividad estuvieron a cargo de Yasmín de la Cruz, directora provincial de Cutlura y quien resaltó la importancia de la fecha, no solo para las mujeres, sino para la democracia dominicana.
Luego tres jóvenes declamaron el poema Amen de Mariposas, de Pedro Mir.
Romina Vianchini, coordinadora internacional de MUjeres por la Cultura expresó que hay una preocupación mundial para terminar las agresiones contra las mujeres.
Manolo Tavares habló en nombre de la familia y la fundación Hermanas Mirabal, indicando que la inmolación de las tres mariposa valió la pena.
“En esos tiempos había temor y miedo, pero ellas sabiendo el riesgo que se corría decidieron ir a Puerto Plata a ver sus esposos y entonces se produjo el crimen”, subrayó Tavars.
A las actividades asistieron decenas de dirigentes comunitarios y populares, como ocurre cada 25 de noviembre.