Fuera de los fallos técnicos, las baterías de Litio como las que usan la gran mayoría de los dispositivos electrónicos, tienden a sobre calentarse y explotar bajo ciertas condiciones como la temperatura del ambiente, malos tratos como golpes y presión.
Justamente esto fue lo que provocó que una batería de reemplazo para iPhone terminara reventando en la cara de un cliente en China, que buscaba comprobar la calidad de la batería que le estaban mostrando.
En primer lugar, la calidad de una batería no puede ser comprobada a simple vista, en algunos casos es posible deducir por el precio y la terminación pero esto tampoco es algo determinante. Por así decirlo, la batería tiene que estar conectada al dispositivo correspondiente o a cualquier otro capaz de hacer una medición y diagnostico.
En todo caso, aunque no resulto nadie herido en el incidente, es importante siempre tener en cuenta las precauciones de seguridad que normalmente vienen escritas en este tipo de componentes que pueden resultar peligrosos cuando de cumplen ciertas condiciones especificas.