MIRYANG, Corea del Sur— Un incendio destruyó este viernes un pequeño hospital carente de aspersores en Corea del Sur, causando la muerte de 37 personas, muchas de ellas ancianas. Se trató del peor incidente de su tipo en una década.
Más de 140 personas resultaron heridas. El hospital Sejong, en la ciudad de Miryang, en el sureste, tiene un pabellón separado tipo asilo donde 94 pacientes de edad avanzada recibían atención y todos estaban a salvo después de su desalojo, según las autoridades de los bomberos.
La mayoría de las víctimas estaban en los pisos primero y segundo del pabellón general del hospital, de seis niveles, donde se ubicaba la sala de emergencias y la unidad de cuidados intensivos. Las autoridades dijeron que el fuego comenzó en la sala de emergencias.
Kim Han-su, un policía de Mirayng, dijo que 34 de las víctimas fatales eran mujeres y que 26 tenían unos 80 años o más. Dijo que la policía podría anunciar este sábado la causa del fuego.
Los investigadores de la policía y del servicio forense provistos de vestimenta blanca, máscaras y cascos examinaban el equipo chamuscado en la sala de emergencias que estaba ennegrecida por el humo.
Humo negro y flamas salían de la sala de emergencia a la llegada de los bomberos, que utilizaron escaleras para ingresar por las ventanas del segundo nivel. Algunos cargaban pacientes en la espalda y los entregaban a otros socorristas abajo, que los llevaban en camillas hasta las ambulancias.
Numerosos materiales de tela colgaban de las ventanas del sexto nivel debido a que fueron utilizados para desalojar a pacientes y personal médico.
Decenas de camiones antiincendios y dos helicópteros fueron enviados al hospital mientras humo negro y denso inundaba las calles alrededor. El incendio fue sofocado en unas tres horas.
Tres de los fallecidos trabajaban en el centro: un médico de urgencias, una enfermera y un auxiliar de enfermería de la segunda planta, explicó Son Kyung-cheol, director de la fundación que gestiona el hospital.
La mayoría de las víctimas al parecer fallecieron de asfixia y solo una de ellas presentaba quemaduras, dijo un funcionario de la Agencia Nacional de Bomberos que habló bajo condición de anonimato porque no estaba autorizado a informar a los medios.
La policía dijo que 143 personas resultaron lesionadas y de ellas siete estaban en condición grave.
El centro carecía de aspersores antincendios debido a que no son obligatorios por ley, dijo Son. Responsables de los bomberos alegaron que el hospital no era lo suficientemente grande para contar con este sistema.
El funcionario de bomberos Choi Man-wu dijo que la policía investiga si el hospital no fue sometido a alguna inspección de seguridad obligatoria, aunque Son informó que era el caso efectivamente.
Si se determina que hubo problemas de seguridad en el incendio, las autoridades locales y de hospitales posiblemente enfrentarán severas críticas de la gente.
En 2014, 300 personas murieron en Corea del Sur debido al hundimiento de un transbordador, tragedia que puso al descubierto deficiencias graves en la seguridad pública. Las autoridades responsabilizaron de ese desastre a la negligencia de la tripulación, exceso de carga, almacenamiento inadecuado, acciones de rescate carentes de profesionalismo y actos de corrupción de parte de los dueños de las embarcaciones.
El presidente del país, Moon Jae-in, se reunió de emergencia con sus principales asesores e instruyó a diversos cargos que se provea el tratamiento médico necesario para los sobrevivientes, se encuentre la causa exacta del fuego y se elaboren medidas para prevenir nuevos incendios, dijo el portavoz presidencial, Park Su-hyun
Corea del Sur es una de las naciones de más rápido envejecimiento poblacional en el mundo y tiene varios hospitales para adultos mayores.
En 2014, un incendio iniciado por un paciente de 81 con demencia dejó 21 fallecidos en un hospital para ancianos.
En otros incendios recientes, 29 personas murieron a finales de diciembre en un edificio en el centro de Seúl, el anterior fuego que causó más víctimas fatales en la última década antes del ocurrido el viernes.
El pasado fin de semana, seis personas perdieron la vida en un motel de Seúl por otro fuego y las autoridades detuvieron a un hombre que supuestamente originó las llamas enojado después de que le negaran una habitación por su estado de embriaguez.