Santo Domingo, RD.- República Dominicana fue sede de un taller regional sobre crimen y seguridad, con la participación de funcionarios y expertos locales, así como de Haití y Jamaica, en el marco del proceso de identificación y formulación del “Programa Multipaís de Seguridad Fronteriza”, con un financiamiento de 5 millones de euros aportados por la Unión Europea.
El embajador Antonio Vargas Hernández, en compañía de José Izarra, jefe de Cooperación de la delegación de la Unión Europea en el país, así como de funcionarios de Haití y Jamaica, encabezó la actividad, organizada por la Dirección General de Cooperación Multilateral (DIGECOOM), del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo, en coordinación con la delegación europea.
Los representantes de los tres países, buscan con este espacio de discusión, producir un documento de acción consensuado, para garantizar una mayor efectividad en su implementación en los países.
Al pronunciar las palabras de bienvenida, el embajador Vargas Hernández, ordenador nacional de los Fondos Europeos para el Desarrollo, señaló que el Caribe por su ubicación intermedia entre zonas productoras de drogas y los mercados consumidores, es una ruta obligada para los narcotraficantes, por lo que está experimentando una expansión en el tráfico de drogas ilícitas.
Dijo que esto constituye un factor clave de las altas tasas de homicidios por efecto de las drogas y principalmente porque el dinero derivado del comercio es usado para comprar armas, y financiar otras actividades delictivas, agravados por la rivalidad entre pandillas y grupos del crimen organizado para controlar el territorio.
Otra de las problemáticas que enfrentamos, añadió, están relacionadas con el tráfico ilícito de armas, tráfico y trata de personas, el crimen electrónico y lavado de activos.
En ese sentido, indicó que las actividades delictivas transnacionales y su impacto potencial en la seguridad humana y la economía, representan una preocupación creciente para el Caribe y para la Unión Europea, ya que el aumento de este tipo de actividades debilita el tejido social y genera violencia, lo cual distorsiona la economía y socava los esfuerzos de desarrollo sostenible.
Finalmente, el funcionario destacó que en el caso particular de la República Dominicana, el tema de la seguridad nacional, sintoniza con la Estrategia Nacional de Desarrollo 2030 como una de las prioridades del gobierno del presidente Danilo Medina.