REDACCIÓN INTERNACIONAL.- Estados Unidos se retiró hoy del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, un órgano muy criticado por el Gobierno de Donald Trump, en una decisión que fue calificada de "decepcionante, pero no sorprendente" desde la ONU.
En una rueda de prensa sin preguntas en Washington, la embajadora de ese país ante la ONU, Nikki Haley, anunció que "Estados Unidos se retira oficialmente del Consejo de Derechos Humanos de la ONU".
La representante justificó esta decisión por las posturas en el organismo de países como China, Venezuela, Cuba o la República Democrática del Congo, ya que, a su juicio, "no respetan" los derechos humanos.
Por este motivo y por el "prejuicio crónico" del Consejo contra Israel, de acuerdo con palabras de Haley, este órgano "no es digno de su nombre".
Aun así, la embajadora, que ya amenazó el año pasado con retirar a EE.UU. del Consejo con sede en Ginebra, explicó que durante los últimos meses ha tratado de resolver "de buena fe" los problemas de ese organismo reuniéndose con representantes de más de 125 países miembros.
El secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, que también estuvo presente en esta declaración a los medios, aplaudió la figura de Haley como embajadora frente a la ONU y tildó al Consejo de órgano "hipócrita".