REDACCIÓN INTERNACIONAL.- La compañía estadounidense Apple aceptó finalmente que los teclados de algunos modelos MacBook y MacBook Pro son más propensos a fallar debido al mecanismo de segunda generación en forma de “mariposa” que integran.
De acuerdo al portal The Inquirer, este tipo de mecanismo tienen el doble de posibilidades de dañarse en comparación con el que integran los teclado tradicionales, causando que algunas teclas no funciones de forma correcta y se sientan pegajosas al interactuar con ellas.
Hasta el momento, la reparación del teclado de un MacBook o un MacBook Pro podía superar fácilmente los 600 euros. Esto se debe a que, dado el diseño integral del equipo, había que sustituir una gran parte del ordenador para poner un teclado que funcionara. Y, aún así, era posible que el fallo volviera a reproducirse, pues el fallo en el diseño seguía en el teclado de sustitución.
Los modelos que entran dentro de este programa de reparaciones fuera de garantía son los siguientes: