Al hacer el anuncio, el primer ministro, Jacques Guy Lafontant, llamó a la paz y solicitó el restablecimiento del orden.
Las protestas se produjeron luego de que las autoridades dispusieran aumentos de un 49 % en el precio de la gasolina; de un 40 % en el gasóleo (diesel) y más de un 50 % en el queroseno, este último muy utilizado para alumbrar las casas haitianas de amplios sectores de escaso poder adquisitivo.
Medios de comunicación locales afirman que el presidente haitiano, Jovenel Moise, hablará al país en las próximas horas, tras regresar al país procedente de Jamaica, donde se celebró la cumbre del Caricom.
Por otra parte, autoridades confirmaron que varios hoteles fueron atacados en la exclusiva zona de Pentionville, en Puerto Príncipe, mientras que decenas de vehículos han sido incendiados y saqueados otros tantos supermercados.
El aeropuerto Toussaint Louverture, de la capital, anunció el cierre de sus operaciones y se reportaron hechos de violencia en otros puntos del país.
El incremento en el precio de los combustibles es una de las medidas tomadas por el Gobierno haitiano como parte de un programa de ajustes firmado en febrero pasado con el Fondo Monetario Internacional (FMI).