SANTO DOMINGO, RD.-En una disertación en la Asociación de Industrias de la República Dominicana AIRD, el gobernador del Banco Central de la República Dominicana, Héctor Valdez Albizu, anunció las primicias del desempeño reciente de la economía y sus resultados preliminares durante enero-julio 2018.
Las cifras preliminares indican que la economía dominicana mantiene su ritmo de expansión, mostrando un crecimiento económico promedio de 6.7% en enero-julio, sustentado en un comportamiento positivo de casi todas las actividades en términos de valor agregado real. Para el mes de julio, el crecimiento del Indicador Mensual de Actividad Económica fue de 6.5%.
Los fuertes fundamentos macroeconómicos de la economía dominicana y el notable desempeño reciente, se reflejan en el último reporte del Panorama Económico Mundial (WEO, por sus siglas en inglés) del Fondo Monetario Internacional, el cual proyecta que en términos del PIB per cápita (en dólares ajustados por la Paridad de Poder Adquisitivo), el país ocupará la sexta posición de las economías latinoamericanas al cierre 2018, escalando tres posiciones respecto al año 2012.
En su disertación, Valdez Albizu dijo que las actividades económicas de mayor incidencia en el desempeño del primer semestre fueron: Construcción (10.6%), Zonas Francas (10.1%), Comercio (8.4%), Salud (8.3%), Comunicaciones (7.0%), Transporte y Almacenamiento (6.9%), Manufactura Local (6.5%), Servicios Financieros (6.4%), Energía y Agua (6.4%), Agropecuario (6.2%), Hoteles, Bares y Restaurantes (5.2%), entre otras.
La actividad Hoteles, Bares y Restaurantes creció en 5.2% en términos de valor agregado real en este periodo, impulsado por la llegada de visitantes no residentes, con un crecimiento acumulado de 5.9% en enero-julio 2018, equivalente a 227,140 turistas adicionales, para un total de 4,106,474 visitantes.
El comportamiento de Producto Interno Bruto (PIB), desde la óptica del gasto agregado, se explica por el dinamismo exhibido en la demanda interna, al crecer en 7.4% durante enero-junio 2018. Dentro del consumo total, el consumo privado representó el 68% del PIB, y la Formación Bruta de Capital privada aportó el 86% de la inversión total.
Al analizar la evolución de los componentes de la demanda agregada durante el período 2014-2017, en que la economía registró un crecimiento promedio de 6.5%, se observa que el 50.4% del mismo estuvo explicado por el consumo privado, un 11.8% por el consumo público, un 34.8% por la inversión bruta interna, mayormente de naturaleza privada, y un 3.0% por las exportaciones netas. Cabe destacar que el 85% de la demanda interna de la economía proviene del sector privado, lo que demuestra que este sector ha sido el principal propulsor del crecimiento económico de la República Dominicana en los últimos años. Lo anterior demuestra que el desempeño económico reciente no ha estado sustentado en endeudamiento externo.
En este sentido, el Gobernador del Banco Central destacó que en la actualidad la deuda externa es sostenible, como lo ha señalado públicamente en más de una oportunidad y lo reconocen a su vez los organismos internacionales. Asimismo, enfatizó la importancia de mantener un superávit primario en la ejecución presupuestaria, a fin de garantizar la sostenibilidad de la deuda en el tiempo.
Igualmente, resaltó el importante papel que ha jugado el Ministro de Hacienda, Donald Guerrero, quien ha expresado públicamente estos mismos planteamientos y ha venido realizando un manejo magistral del endeudamiento externo, mejorando el perfil de la deuda, es decir alargando los plazos y logrando menores tasas interés, a la vez gestionando recursos externos frescos que permitan continuar enfrentando los principales problemas sociales de los sectores más vulnerables de la población y mejorar la calidad del gasto público.
En el panorama internacional actual se vislumbran incertidumbres y expectativas relacionadas con la política comercial y revisiones de tratados de libre comercio entre las mayores naciones del mundo; además de riesgos asociados al fortalecimiento del dólar estadounidense, al aumento en las tasas de interés, a conflictos geopolíticos y a la tendencia alcista de los precios internacionales del petróleo, con la posibilidad de contagio ante eventos económicos y financieros en Argentina, Turquía, Irán, entre otros, que pudieran incidir sobre los flujos de capitales desde las economías emergentes hacia los Estados Unidos.
Sin embargo, a pesar de este panorama un tanto sombrío, los organismos y analistas aún mantienen las perspectivas económicas internacionales favorables, con una economía global; creciendo en torno al 3.9% en 2018; Estados Unidos de América, nuestro principal socio comercial, estaría creciendo en 2.9%, con una tasa de desocupación menor al 4.0% anual (pleno empleo), realmente niveles no vistos en casi 20 años.
Por otro lado recientemente, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) publicó que la región crecería 1.5% en 2018, y que la República Dominicana estaría liderando dicho crecimiento económico, seguido por Panamá. Este liderazgo se ha mantenido en los últimos años, alcanzando el más alto ritmo de expansión regional, así como también la segunda menor inflación de las economías no dolarizadas de América Latina.
Adicionalmente, al comparar algunos de los indicadores económicos con los países centroamericanos y del Caribe Insular, se dimensionan los avances alcanzados por economía dominicana. En este sentido, el pasado año el país ocupa la primera posición en ingresos por turismo, incluyendo en este renglón a Suramérica. En 2017 el déficit en cuenta corriente fue de apenas -0.2% del PIB. Asimismo, se ubica en el segundo lugar como receptor de Inversión Extranjera Directa, después de Panamá, en segundo en Remesas después de Guatemala, así como en tercer lugar en exportaciones de bienes y servicios.
Resulta relevante destacar algunas declaraciones de reconocidos bancos y fondos de inversión internacionales, que muestran la percepción favorable en el contexto regional y la confianza que les inspira el país a los inversionistas extranjeros, dado el clima de estabilidad macroeconómica y política que exhibe.
En enero-junio 2018, la cuenta corriente de la Balanza de Pagos presentó un déficit de US$141.3 millones, principalmente por el incremento de 31.7% en la factura petrolera con relación a igual período de 2017.
Las exportaciones totales de bienes alcanzaron US$5,434.3 millones en dicho período, aumentando en US$421.1 millones. Las exportaciones de bienes nacionales ascendieron a US$2,348.8 millones, con un incremento de 5.0%; y las exportaciones de zonas francas aumentaron 11.1%, con un valor exportado de US$3,085.5 millones.
El turismo, con su liderazgo en la generación de divisas, reportó ingresos por US$4,690.8 millones en enero-julio 2018, un crecimiento de US$205.7 millones adicionales comparado con igual período 2017, sustentado por la llegada de viajeros no residentes, principalmente desde América del Norte, y el aumento en el gasto promedio de los turistas durante su estadía en el país.
De la misma manera, se recibieron flujos por US$3,800.6 millones por concepto de remesas en enero-julio 2018, para un notable aumento de 11.1% con respecto a igual periodo del año 2017, explicado en gran medida por las condiciones actuales de pleno empleo en los Estados Unidos de América, donde reside un número importante de la diáspora dominicana.
Por otro lado, la inversión extranjera directa ascendió a US$1,594.6 millones en enero-junio 2018, un significativo aumento de 20.2% respecto al mismo período de 2017, principalmente canalizada a los sectores turismo, energía y minería, lo que refleja que el país se mantiene como un destino atractivo para los inversionistas extranjeros.
Resulta importante destacar que los ingresos de divisas durante el primer semestre de 2018, por concepto de exportaciones de bienes, turismo, remesas, inversión extranjera directa y otros ingresos por servicios ascendieron a US$15,038.9 millones, lo que representa unos US$1,232.3 millones adicionales con respecto a 2017.
Este incremento en los ingresos de divisas facilitó la acumulación de Reservas Internacionales Brutas, que se elevaron al 31 de agosto a US$7,434.8 millones, equivalentes a 4.5 meses de importaciones sin considerar las zonas francas. Si se excluyen los depósitos del Gobierno por US$936.8 millones, las Reservas Internacionales disponibles ascienden a US$6,498.0 millones a la fecha indicada, que representan 4 meses de importaciones, por encima del umbral de 3 meses de importaciones considerado como adecuado.
Un aspecto importante a resaltar es la estabilidad cambiaria mostrada durante el presente año, la cual ha sido posible por el influjo de divisas que ingresa a la economía, por los conceptos antes mencionados de exportaciones, turismo, remesas e inversión extranjera directa, y no en deuda que emite el Banco Central. En este sentido, la depreciación nominal acumulada al 31 de agosto fue de 3% con respecto al 31 de diciembre de 2017, con una tasa de cambio de venta de RD$ 49.78/US$, muy por debajo del nivel contemplado en el Presupuesto de RD$51.05/US$ para el cierre de 2018. Este comportamiento ha sido cónsono con un Tipo de Cambio Real alineado con los fundamentos macroeconómicos.
En este contexto, el Banco de Inversión Oppenheimer al referirse en mayo pasado a la emisión internacional de deuda en moneda local, expresó que el peso dominicano es “un titán de las monedas de los mercados emergentes”; y en un comentario el pasado mes de agosto, destacó que la moneda dominicana es una de las menos volátiles junto a las de Malasia, Singapur, Chile, Tailandia y Taiwán, lo que atrae a los inversionistas internacionales.
“En cuanto a la inflación, tengo a bien informarles que el Índice de Precios al Consumidor permaneció en agosto prácticamente invariable por segundo mes consecutivo. Este comportamiento obedece a que se redujo el índice del grupo Alimentos y Bebidas No Alcohólicas en -0.80% en el mes de agosto, neutralizando prácticamente en su totalidad las variaciones positivas registradas en Educación (2.04%), que estacionalmente aumenta para esta época del año, Vivienda (0.48%), Transporte (0.36%), Recreación y Cultura (0.31%), Salud (0.18%), entre otros”, dijo el funcionario.
Con el resultado del mes de agosto, la inflación acumulada del periodo enero-agosto 2018 es de 1.44%, mientras que la inflación interanual, medida desde agosto 2017 hasta agosto 2018, se ubicó en 3.87%.
Durante el presente año, las condiciones monetarias se han mantenido favorables, como resultado de las medidas expansivas implementadas en agosto de 2017, que contribuyeron a que las tasas de interés de los bancos múltiples disminuyeran a mínimos históricos y se acelerara el flujo del crédito privado. En ese sentido, se ha evidenciado un alto dinamismo del financiamiento al sector privado en moneda nacional, al crecer de forma interanual en 12.7% al cierre de agosto de 2018, recuperándose la demanda interna y la actividad económica.
De forma particular, la industria manufacturera ha sido el sector productivo que más se ha beneficiado de esta expansión del crédito privado. Específicamente, a la última fecha disponible al 31 de agosto 2018, los préstamos al sector manufacturero crecieron en términos interanual en 26.1%, equivalente a un incremento de unos RD$13,800 millones en los últimos 12 meses.
En este contexto, el Banco Central en su misión constitucional de velar por la estabilidad de precios, a fin de contribuir a crear certidumbre y un clima de negocios propicio a la inversión y a la generación de empleos productivos, en la reunión de política del mes de julio decidió incrementar la tasa de política monetaria en 25 puntos básicos de 5.25% anual a 5.50% anual.
Esta decisión de política monetaria tomó en consideración los mayores precios del petróleo y la incertidumbre en los mercados internacionales, que podrían generar presiones inflacionarias y poner en riesgo la meta del Banco Central. Adicionalmente, esta medida contribuye a evitar desvíos importantes en el diferencial entre las tasas de interés domésticas y las de Estados Unidos de América, que se encuentra en proceso de normalización de su política monetaria.
Al adoptar esta medida, el Banco Central se mueve hacia una postura más neutral, la cual tiene por objetivo que el crecimiento económico converja a su potencial y la inflación se mantenga en el rango meta de 4% ± 1% del Programa Monetario, en el horizonte de dos años.
En cuanto a la Recapitalización del Banco Central, el Gobernador anunció al país que existe un Anteproyecto de Ley elaborado de común acuerdo entre el Ministerio de Hacienda y el Banco Central para buscar una solución legal, financiera y fiscalmente sostenible, que permitirá en menos de diez años erradicar este tema de los puntos pendientes de la Agenda Nacional. En efecto, estas instituciones se encuentran afinando los últimos detalles de un esquema novedoso, que recoge las mejores prácticas mundiales en esta materia y que utilizará una de las figuras que contempla la Ley No. 189-11, sobre el Mercado Hipotecario y el Fideicomiso.
Una vez más se percibe que alrededor de estos temas se generan mitos y leyendas urbanas, cuando la realidad es que esta misma situación ha sido enfrentada por bancos centrales de otros países que aún al día de hoy se encuentran en el proceso de capitalización, como ha sido el caso de Chile desde los años ochenta a la fecha.
En lo que respecta al Sistema Financiero dominicano, sus indicadores principales revelan que se mantiene líquido, robusto, rentable y patrimonialmente fortalecido, con un coeficiente de solvencia a la última información disponible de 18.75%, superior al mínimo requerido por la Ley Monetaria y Financiera vigente, de 10%; y al establecido por Basilea III.
Cabe destacar que, en línea con las mejores prácticas internacionales, en adición a la fortaleza de tener un sistema financiero estable y solvente, se dispone de un Sistema de Pagos moderno y a la vanguardia para enfrentar junto con el sector privado, los riesgos inherentes a la ciberseguridad y a las innovaciones tecnológicas, que son las tendencias prevalecientes en la Era Digital.
En la parte fiscal, el Gobierno ha mantenido un crecimiento moderado del gasto público en enero-julio del año 2018, de apenas 1.4% interanual, al tiempo que las recaudaciones registran un incremento en el mismo período de 13.4% al cierre de julio. Esta combinación de ingresos y gastos ha permitido que el sector público no financiero presente un déficit estimado de apenas -0.2% del PIB al cierre de julio y de -0.9%e para el sector público consolidado, lo que apunta a que al final del año se termine por debajo de la meta presupuestaria de un déficit de -2.2% del PIB y con un superávit primario de 1.2%.
Para el cierre de 2018, las proyecciones indican que la inflación cerraría dentro del rango meta de 4% ± 1% establecido en el Programa Monetario, y que la actividad económica mantendría su dinamismo durante el resto del año, creciendo por encima de 6.0%, para luego converger a su nivel potencial de 5.0% en el mediano plazo.
Asimismo, en cuanto al Sector Externo, se espera un déficit de cuenta corriente de 0.8% del PIB, con unas exportaciones de bienes en torno a los US$10,500 millones, ingresos por turismo por encima de los US$7,700 millones con la llegada de 6.6 millones de pasajeros no residentes; ingresos en divisas por otros servicios de alrededor de US$1,600.0 millones, Remesas por unos US$6,400 millones, y una Inversión Extranjera Directa cercana a los US$2,800 millones, todo lo cual apunta que al cierre de 2018 podrían ingresar a la economía aproximadamente US$30,000.0 millones.
En sus consideraciones finales, el Gobernador del Banco Central aprovechó el escenario de ese conversatorio con representantes del sector industrial y empresarial, para dar constancia, testimonio y a la vez reconocimiento de que en todo momento el Excelentísimo Señor Presidente de la República, Lic. Danilo Medina Sánchez, ha sido sumamente respetuoso de la autonomía constitucional y legal con que está investido el Banco Central, lo que ha contribuido a una coordinación efectiva de las políticas monetaria y fiscal, en aras de crear certidumbre y un clima de negocios propicio a la inversión y a la generación de empleos productivos.
De igual modo dentro de los avances como país en los últimos años, se refirió a la revolución en materia educativa, destacando la construcción de más de 23,700 aulas a nivel nacional, el aumento salarial a los maestros y de más de 1.2 millones de estudiantes en la tanda extendida. Resaltó que se ha mejorado sustancialmente el acceso a los servicios de salud de los conglomerados más vulnerables, con la construcción y remodelación de más de 35 hospitales modernos, alcanzando más de cuatro millones los dominicanos afiliados al régimen subsidiado en el Seguro Nacional de Salud (SENASA) y funcionando con éxito el valioso servicio del 911.
Asimismo, apuntó que se ha transformado la infraestructura vial, existe un amplio programa de construcción de viviendas de bajo costo y las visitas sorpresas impulsadas por el Presidente de la República, Lic. Danilo Medina Sánchez, han impactado positivamente en la agropecuaria en todo el territorio nacional, entre otros logros que muestran sin lugar a dudas avances tangibles.
Finalizó su participación en el encuentro sostenido en la sede de la Asociación de Industrias de la República Dominicana, expresando que: “Como nación, si queremos mantener el crecimiento económico sostenido, con mayor equidad, inclusión y cohesión social, necesariamente tenemos que impulsar las exportaciones y generar empleos de calidad con mejores salarios. Para todo este camino por recorrer, estoy convencido de que la Asociación de Industrias de la República Dominicana y el sector privado están llamados a jugar un rol importante, y en nuestra opinión, ustedes lo han venido haciendo de manera proactiva. Por nuestra parte, continuaremos haciendo siempre nuestros mejores esfuerzos, apostando con optimismo a la estabilidad macroeconómica y en contribuir a mantener la senda de crecimiento sostenido y el bienestar de toda la colectividad”.