Ninguna actividad humana ha tenido más impacto sobre la forma de vida de los habitantes del planeta que la agricultura, pues gracias ella, nuestros ancestros aprendieron a establecerse en lugares fijos, hasta ese momento eran nómadas en busca de animales para cazarlos, y esto permitió la rápida su rápida multiplicación y posteriormente la aparición de asentamientos que con el transcurrir de los siglos se transformaron en las ciudades que habitamos.
Hoy en día nadie discute la importancia que tiene para la supervivencia de la raza humana, el que todos los países aborden de manera responsable el concepto de ¨seguridad alimentaria¨, que es la garantía al acceso de toda la población a alimentos que sean suficientes, saludables y nutritivos que a su vez nos permitan una vida sana y activa, trabajar para lograr una meta como esta es la principal responsabilidad de cualquier gobierno.
Entonces cuando el pasado viernes el Presidente de la República, Danilo Medina, habló de la economía ideal y la vinculó a la seguridad alimentaria, lo que planteaba era que la necesidad de que lográramos como país el lograr cumplir con la meta de que todos los dominicanos tengan acceso físico a los alimentos, que estos se consigan a precios razonables y que sean de calidad suficiente para la nutrición de quienes habitan el país.
El día mundial de la agricultura que se celebra cada año el 9 de septiembre, encuentra a la República Dominicana cada vez más cerca de lograr la meta poder llevar alimentos al 100% de la población, gracias al impulso que ha tenido el sector agrícola por el interés que ha puesto la actual administración, porque sin dudas la producción de agrícola ha sido beneficiada con la implementación de políticas públicas que han provisto a nuestros productores de un ambiente propicio para su expansión y desarrollo.
No hay dudas de que el actual gobierno ha trabajado desde el primer día de gestión en favor de los hombres y las mujeres que viven en el campo, y que las visitas sorpresa han sido un aliciente económico y hasta sicológico para esa parte de nuestra población que por muchos años había sido olvidada, a pesar de que solo ellos son capaces de proveer los alimentos necesarios para los que vivimos en las ciudades y somos dependientes de su labor de cada día.
Según la pagina web del Ministerio Administrativo de la Presidencia, que es la entidad gubernamental encargada de darle seguimiento a las visitas sorpresa, se han efectuado 220 de estas actividades, con un compromiso presupuestario de 57 mil millones de pesos, de los que se han ejecutado 38 mil millones destinados a 1,696 proyectos, de los cuales 904 ya están terminados, es decir una inversión directa cuantiosa que provee de fondos a los grupos campesinos organizados.
Estamos entonces frente al empuje mas importante que ha recibido el sector agrícola del país en toda su historia, que ya se refleja en el aumento de la disponibilidad de alimentos para nuestros habitantes y en la cifras de productos agrícolas que exportamos a nuestros principales socios internacionales, donde hay proyecciones de un aumento sustancial del ingreso de divisas al país por los rubros que estamos en capacidad de colocar en los mercados internacionales.
A esto tenemos que agregarle la meta del Presidente Medina de convertir la República Dominicana ¨en un país de propietarios¨, con la entrega de títulos de propiedad a miles de familias que han detentado por décadas parcelas entregadas durante los diferentes gobiernos que hemos tenido y por no estar en posesión de un titulo no pueden ser objeto de préstamos por parte de la banca, es decir, un simple trámite burocrático los mantiene alejados de la oportunidad de ser productivos.
Todo lo que ha estado ocurriendo en el sector agrícola es parte de un plan, confesado por el presidente de la República, de lograr que la República Dominicana llegue a ser un país con seguridad alimentaria, que debe ser la meta a que aspiremos como Nación, y al mismo tiempo que el avance económico llegue a los bolsillos de los que hasta ahora han sido los grandes olvidados de nuestro desarrollo, los campesinos.
Y es que la pobreza histórica que hemos tenido está vinculada a esos olvidados hombres y mujeres que viven en el campo, los que con su sudor hacen parir la tierra y ponen los alimentos en nuestra mesa, también a ellos les interesa que parte de la riqueza que producen con su esfuerzo, sea devuelta con acciones de parte del gobierno que les permita elevar la calidad de vida de ellos y sus familias, y todavía son una tercera parte de nuestra población.
Esta es la realidad del campo dominicano al día de hoy, personas que solo tenían la oportunidad de ver a un presidente de lejos, ahora lo tienen cerca, pueden conversar con él, explicarle lo que los afecta y ven como los problemas que tienen sus comunidades son resueltos.
¿Es este el secreto de los altos niveles de popularidad que tiene Danilo Medina?, eso lo dirán el tiempo y las circunstancias.