La tenista estadounidense recibió tres sanciones de parte del juez de silla Carlos Ramos el sábado por sus infracciones durante su derrota por 6-2, 6-4 ante la japonesa Naomi Osaka: por recibir instrucciones de su entrenador; por romper su raqueta _lo que automáticamente le costó un punto; y por tildar de ladrón a Ramos, una infracción por “abuso verbal” que le costó un game.
El torneo anunció el domingo que Williams fue multada por 10.000 dólares por “abuso verbal” hacia el juez, 4.000 dólares por una advertencia de recibir orientación de su entrenador y 3.000 dólares por romper la raqueta. El dinero le será descontado de su premio de 1,85 millones de dólares como subcampeona.
La Federación Internacional de Tenis (ITF por sus siglas en inglés) informó el lunes en un comunicado que las sanciones impuestas por Ramos fueron “reafirmadas por la decisión del U.S. Open de multar a Serena Williams por las tres infracciones.”
“Ramos asumió su deber como juez de acuerdo con el reglamento pertinente y en todo momento actuó con profesionalismo e integridad”, enfatizó el organismo rector del tenis mundial.
En el segundo game del segundo set, Ramos le dio una advertencia a Williams por recibir direcciones de su entrenador, lo que contraviene en partidos de Grand Slam. Williams discutió brevemente sobre la advertencia, diciéndole al juez portugués que hacer trampa “es la cosa que nunca he hecho”. Sin embargo, después, su entrenador Patrick Mouratoglou reconoció que intentó mandarle una señal a la estadounidense.