REDACCIÓN INTERNACIONAL.- Desde temprano el viernes azota la costa de Carolina del Norte con vientos de 144 kilómetros por hora e incesante lluvia, más de 100 personas han sido impactados por una marea de tormenta que ya ha alcanzado los 3,08 metros, mientras docenas más esperan ser rescatados.
Wilmington, Carolina del Norte, ya siente la furia del huracán Florence que tocó tierra cerca de Wrightsville Beach. Más de 400.000 personas están sin electricidad en la zona y la tormenta se mueve a unos 8 kilómetros por hora.
La Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) instó a no bajar la guardia.
"Sólo porque la velocidad del viento bajó, la intensidad de la tormenta bajó a dos, por favor no bajen la guardia", advirtió di director, Brock Long.
El boletín de las 21H00 GMT del Centro Nacional de Huracanes (NHC) advierte contra los riesgos de los potentes vientos sostenidos de 155 km/h y las lluvias torrenciales.