En Carolina del Norte, las inundaciones continúan a más de una semana después de que Florence tocó tierra, explicó el gobernador Roy Cooper quien afirmó que nueve medidores de los ríos del estado están en nivel máximo y cuatro otros en moderado.
De acurdo a la versión del funcionario, algunas secciones de dos carreteras continuarán bajo agua por una semana más.
Los funcionarios de emergencias dijeron que los residentes cuyos hogares resultaron dañados o quedaron destruidos comenzarán a mudarse a habitaciones de hotel en los próximos días.
“El huracán Florence hirió profundamente a nuestro estado, heridas que no desaparecerán pronto hasta que las aguas finalmente retrocedan”, dijo Cooper.
Carolina del Sur también ordenó más evacuaciones a medida que aumentan las crecidas de los ríos tras el paso de una tormenta que ha provocado la muerte de por lo menos 43 personas desde que comenzó a azotar la costa hace una semana.
La pequeña comunidad agrícola de Nichols, en Carolina del Sur y ubicada a 65 kilómetros (40 millas) de la costa, quedó completamente inundada, dijo el alcalde Lawson Batter.
En Wilmington, ciudad que quedó aislada del resto de Carolina del Norte por las inundaciones causadas por Florence, las autoridades dijeron que ya identificaron tres rutas seguras hacia la ciudad.
Pidieron a la gente evitar viajar en zonas en las que continúa el riesgo de inundaciones.