Jaron Lanier es un informático precursor de todo el mundo creado a partir de la explosión informática que ha tenido como centro Silicon Valley en California, Estados Unidos, donde se localizan la mayoría de las grandes empresas que constituyen el núcleo duro de la era digital que estamos viviendo en los últimos años, lo que quiere decir que conoce desde dentro de lo que habla cuando se refiere al tema de la industria del manejo de datos y la forma en que estas compañías manipulan para su beneficio al enormes cantidades de seres humanos.
A partir de su conocimiento cómo ha evolucionado a ser un filosofo de nuestro tiempo, pues se hace cuestionamientos sobre el sentido de la vida que estamos creando, la cultura superficial construida en el era del internet y en su último libro, cuyo título encabeza este escrito, enumera una serie de razones de peso, muy bien pensadas y analizadas, donde plantea una tesis que viene manejando hace mucho tiempo: el por qué debemos alejarnos de forma inmediata de las redes sociales para volver a ser personas libres y felices.
La base de las ideas de Lanier, se centran en cómo nos hemos convertido en animales domesticados por una serie de algoritmos creados por matemáticos asociados a las grandes compañías informáticas, pues somos manipulados claramente para actuar en base a estudios de como nos comportamos frente a estímulos de diversos tipos y como la interacción con Google, Facebook, Snapchat, Twitter, Instagram y todos los etcéteras que queramos agregarle, nos esta arruinando la vida personal y destruyendo las instituciones que habíamos creado colectivamente.
Ya antes de morir y como documento póstumo, el genio de la semiótica y escritor italiano Umberto Eco había advertido, que eso de las redes sociales era un espacio creado para los idiotas, porque era un lugar como el bar del pueblo donde cada quien frente a una copa de vino decía lo que le daba la gana y un ignorante que solo leía periódicos o absolutamente nada, era capaz de contradecir y discutirle a un premio Nobel sobre un tema de su especialidad.
Para quien dude de lo que dicen Lanier o Umberto Eco, solo tendría que buscar las palabras nuevas agregadas al idioma inglés, a sugerencia de uno de los centros del saber más importantes del mundo, la muy británica Universidad de Oxford, pues son post-truth (post-verdad) que no es mas que otra forma de usar la palabra ¨mentira¨ enmascarada y ¨Fake News¨ (noticias falsas), que por supuesto son las afirmaciones que se hacen en las redes sociales sobre temas creados para manipular a la opinión de las mayoría de los idiotas que se pasan el día hipnotizados ante una pantalla brillante.
Es interesante la actitud que han tomado los grandes nombres de Silicon Valley con sus familias, muy especialmente sus hijos, ya que se sabe que se jactan de evitar a toda costa que sus familias se involucren en este nuevo vicio, es más, tanto Bill Gates como Mark Zuckerberg, dos de los más grandes beneficiarios económicos de esta era de la información, prohibieron a sus hijos el uso de las redes sociales y ni pensar que van a hacer participes de sus vidas privadas a millones de desconocidos.
El fenómeno de la agresividad de muchos de nuestros conciudadanos en las redes sociales, se ha ido extendiendo de tal manera que es digno de estudio, sobretodo en una ciudad como Santo Domingo donde poco a poco han ido desapareciendo las librerías, solo hay una que se mantiene como un hobbie por sus dueños, y el conocimiento es sustituido por la superficialidad y el mal gusto de individuos dedicados en los medios de comunicación tradicionales, a la promoción del insulto y la injuria fruto de la ignorancia que en estos días campea por sus fueros.
Ante esta realidad, Lanier tiene una explicación en su libro que nos parece de lo más interesante, y es probable que explique el porque personas, muchas de las cuales conocemos por ser este un país tan pequeño, se han convertido de individuos formales y corteses, en perros rabiosos que muerden a través de las palabras en estas redes que se prestan para todo, como si el solo hecho de estar protegidos por una pantalla los hubiera convertido en seres irracionales que tratan a los demás como enemigos mortales por el solo hecho de que no se comparta un punto de vista cualquiera.
Hemos visto por aquí, como amistades de muchos años se rompen, compañerismos construidos por décadas y con historia de años se fracturan, simplemente porque las redes sociales nos quieren convertir en reses participantes y miembros de una manada, donde la búsqueda de los ¨likes¨ y la aprobación general se consigue siguiendo la corriente de los que se convierten en ¨trending topic¨ haciendo uso de la mala educación, el insulto fácil, la propagación de idioteces o simplemente acusando y señalando a quien sea con el fin de gozar de 15 minutos de fama sin importar a quien se afecte.
¿Porqué la agresividad, la acusación y juicio contra cualquiera y el insulto fácil?
Citemos a Lanier: ¨Mucha gente se comporta de una forma extraña y desagradable en internet. Este curioso fenómeno sorprendió a todo el mundo en los inicios de las redes y ha tenido un efecto profundo sobre nuestro mundo. Aunque no todas las experiencias son desagradables, una agresividad familiar tiñe y liga la experiencia en términos generales. La agresividad también resultó ser como el petróleo crudo para las compañías de redes sociales y otros imperios de modificación de la conducta que en seguida llegaron a dominar internet, porque se alimenta de reacciones negativas.
¿Porqué se da esta agresividad? Lo exploraremos en la siguiente razón, pero en pocas palabras; las personas normales se reúnen en un entorno en el cual la principal- y a menudo la única- recompensa disponible es la atención. No es razonable que esperen ganar dinero, por ejemplo. Los usuarios corrientes solo pueden acumular un poder y una riqueza falsos, no poder y riqueza de verdad. Así que prevalecen los juegos mentales.
Sin otra cosa a la que aspirar más que a la atención de los demás, las personas normales suelen transformarse en idiotas, porque los mas idiotas reciben la máxima atención. Ese sesgo intrínseco favorable a la idiotez marca el funcionamiento de todas las demás partes de la máquina¨.
He aquí la razón por la cual tanta gente inteligente se está alejando de ese mundo de superficialidad y manipulación en que se han convertido las famosas redes sociales, es que algunos nos resistimos a ingresar a la legión de idiotas que como focas amaestradas aplauden las tonterías que llenan cada día las pantallas de los teléfonos inteligentes que se han convertido en verdaderas fabricas de estúpidos, después de todo también es un derecho el no querer participar como res en parte de una manada en un mundo al cual se lo quiere uniformizar y manipular.
Las diez razones descritas en el libro son las siguientes.