SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Arrimados en casas de familiares y amigos, los desalojados de Los Guandules, en el Distrito Nacional, esperan el pago que se les ofreció a cambio de sus viviendas, luego de que el Gobierno determinara construir en esos terrenos señalados como no habitables, el proyecto de rescate ambiental Nuevo Domingo Savio.
Mientras unos demandan una retribución económica, calificada desde un principio como pírrica, otros aguardan a que le sean devueltos sus ajuares llevados a un depósito cuya dirección desconocen.
La incertidumbre reina también entre los que fueron censados e incluidos en el desalojo que inició en agosto, pero que lleva al menos un mes detenido, sin que hasta el momento se informe cuándo será retomado.
A la fecha al menos 50 familias de más de mil 500 incluidas en el censo han sido desalojadas.