REDACCIÓN INTERNACIONAL.- La guerra en Yemen, que se intensificó en 2015 con la intervención de la coalición árabe liderada por Arabia Saudita, ha causado la muerte de unos 85.000 niños menores de cinco años, de acuerdo con datos entregados este miércoles por la ONG Save the Children. El reporte abarca el período abril de 2015/octubre de 2018 y se basa en datos recogidos por Naciones Unidas.
Según estas cifras, 84.701 menores perdieron la vida por malnutrición aguda grave y enfermedades asociadas. "Por cada niño muerto por bombas y balas, docenas se mueren de hambre y es algo que se puede prevenir completamente", aseguró la directora de la ONG en Yemen, Tamer Kirolos, que se mostró "horrorizada" de que tal cantidad de seres humanos hayan perdido la vida por culpa del "hambre extrema”.
Los niños que fallecen de hambre "sufren enormemente a medida que las funciones de sus órganos vitales disminuyen y finalmente se detienen", explicó, al resaltar que sus sistemas inmunológicos son tan frágiles que "son más propensos a las infecciones, con algunos tan débiles que no pueden siquiera llorar". Kirolos agregó que "los padres tienen que presenciar cómo sus hijos se van consumiendo, incapaces de hacer nada para evitarlo”.
Fuente: DW