REDACCIÓN INTERNACIONAL.- El derrame ocular, o hiposfagma, se caracteriza por el rompimiento de diminutos vasos sanguíneos localizados en la conjuntiva, causando una mancha roja de sangre en el ojo. La conjuntiva es una fina película transparente que recubre la parte blanca de los ojos llamada esclera.
El derrame ocular es una situación bastante común y que no alcanza el interior del ojo, motivo por el cual no afecta la visión del individuo. Por lo general se cura solo, desapareciendo alrededor de 10 a 14 días, a menudo no requiere ningún tratamiento.
Causas del derrame ocular
Las causas del derrame ocular pueden originarse en procesos irritativos, alérgicos, traumáticos o infecciosos, por lo que la sangre en el ojo puede deberse a:
Los picos de presión arterial y los cambios de la coagulación sanguínea son causas menos comunes que pueden llevar a la aparición de sangre en el ojo.
Tratamiento para el derrame ocular
El tratamiento para el derrame ocular no siempre es necesario, ya que generalmente desaparece solo al cabo de unos días. Sin embargo, lo que se puede hacer para acelerar el proceso de cura es la colocación de compresas de agua fría en el ojo, 2 veces al día.
A veces se utilizan lágrimas artificiales para disminuir la incomodidad y disminuir el riesgo de un nuevo sangrado. Se debe evitar el uso de aspirinas y antiinflamatorios.