SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Tras la muerte de al menos tres niños que fueron infectados con rabia humana, aumentó considerablemente el número de pacientes que acuden al centro antirrábico por mordeduras de perros y gatos y otros animales.
Alejandro Guzmán, director de ese centro de atención, reiteró que tienen vacunas suficientes para atender a las personas que resulten con heridas ocasionadas por las agresiones de esos animales.
“Cuando sean agredidos por un animal lo primero que tienen que hacer es lavarse con abundante agua y jabón, y acudir al centro médico más cercano”, dijo.
Las medidas preventivas que han adoptado los ciudadanos, corresponden al miedo que siente la población por el fallecimiento de tres niños diagnosticados con rabia humana, considera Guzmán, quien recomienda a la población no automedicarse en caso de que sean heridos por la mordedura de algún animal.
“Cuando la persona es agredida viene aquí al centro, aquí es atendida y despachada. De acuerdo a dónde sea el lugar de mordedura se le aplica o no vacuna antirrábica”, señaló.
Mientras tanto, el lugar en donde funcionaba el Centro Antirrábico Nacional permanece con las puertas abiertas, pero sin ofrecer servicios al público y con sus instalaciones en un deplorable estado de abandono.
El portero que se mantiene en la entrada del local, dice que desde distintos puntos del país llegan personas en busca de atenciones médicas.