Al menos cuatro menores, entre ellos una bebé de once meses, murieron en la región metropolitana de Sao Paulo, la mayor ciudad de Brasil, a causa del deslizamientos de tierra causado por las fuertes lluvias que se registraron desde la tarde del sábado, informaron este domingo fuentes oficiales.
Los cuerpos de los menores fueron rescatados en la madrugada de este domingo por el Cuerpo de Bomberos después de que sus casas hubieran sido arrasadas por los aludes que causaron las precipitaciones.
De acuerdo con las autoridades, en una de las casas que fue sepultada por la tierra murieron una bebé de once meses y su hermano de ocho años.
La madre de los menores fue rescatada con una contusión en el hombro y llevada a un centro de salud, junto con otro hombre que también resultó herido.
En la otra vivienda derrumbada, un niño de cuatro años y su hermana de once años también perdieron la vida.
Según la alcaldía de Sao Paulo, trece deslizamientos se registraron en la noche del sábado por las fuertes lluvias.
Las precipitaciones pusieron en estado de alerta a Sao Paulo y a toda su región metropolitana ya que se pueden presentar nuevos deslizamientos de tierra.
De acuerdo con la información de las autoridades, hasta el momento se han registrado 167 árboles caídos y 62 inundaciones.
Las fuertes lluvias comenzaron en la noche del viernes e hicieron que se decretara el estado de alerta hasta la noche del sábado.
La previsión es que el tiempo mejore gradualmente en los próximos días.
La tragedia de Sao Paulo se une a la ocurrida hace doce días en Río de Janeiro donde una tormenta con vientos de hasta 110 kilómetros por hora causó inundaciones, apagones y deslizamientos de tierra en las que murieron siete personas y dejaron al menos 80.000 familias en áreas de riesgo.
De acuerdo con las autoridades brasileñas, en cuatro horas cayó la lluvia esperada para todo el mes de febrero en Río.