República Dominicana.- A propósito de la reunión del Comité General de Salarios este lunes, a fin de buscar consenso entre empresarios, trabajadores y el Gobierno para un aumento salarial en el sector privado, amas de casa y cabezas de familia cuentan el viacrucis que les toca vivir para poder subsistir con el salario mínimo y a veces con menos.
La señora Elizabeth Collado, empleada domestica, se pasa la vida de deuda en deuda para poder salir adelante ganando 15 mil pesos al mes, pagar casa y poder costear los estudios de sus hijos.
Peor es la situación para Santa Arias, quien ni siquiera alcanza el salario mínimo y aunque no paga alquiler, debe pagar mil 200 pesos de servicios básicos como agua y luz, pudiendo librarla un poco más porque se pasa la semana en la casa donde trabaja, pasando únicamente los fines de semana en su casa.
Aunque el salario mínimo para las grandes empresas está establecido en 15 mil 400 pesos, Rafael Moreno solo gana 12 mil, viéndose obligado a hacer otros tipos de trabajo cuando termina su jornada.
Ante lo insuficiente que resultan ser los salarios mínimos en un país donde la canasta básica del primer quintil supera los 13 mil pesos, Marcela Minaya, quien fue empleada privada por más de 20 años, decidió convertirse en trabajadora independiente, lo que le permite percibir cada mes hasta 50 mil pesos en ganancia.
Al igual que ella, Robert Antonio Jiménez y Antonio Then, entendieron que era más ganancioso ser su propio jefe que un asalariado.
El sector sindical mantiene su propuesta de 30 por ciento de aumento salarial para el sector público no sectorizado, mientras que los empresarios insisten en eliminar la cesantía, conquista que advierten los trabajadores no es negociable.