La mujer acusada de dar muerte a cuchilladas a una española en un hecho ocurrido en el sector La Esperilla el pasado viernes, denunciaron que su pariente fue maltratada físicamente, por lo que sostienen que a la misma le fueron violados sus derechos.
La denuncia fue hecha este lunes por el abogado y los familiares de la acusada, tras agregar que al momento de conocerle la medida de coerción se le asignó un defensor público.
El jurista Palermo Medina Falcón, primo de Fatin Leonarda Falcón Alvino, alias Dalida, de 34 años, imputada por la muerte de Cristina García, de 49 años, y quien dijo ser su defensor legal.
Explicó que Falcón Alvino afirmó durante la audiencia que no quería ser representada por un abogado de oficio, ya que tiene uno privado, sin embargo se le conoció al audiencia donde la jueza de la Oficina de Atención Permanente del Distrito Nacional, Octavia Fernández, le impuso tres meses de prisión preventiva a cumplirla en el Centro de Corrección y Rehabilitación (CCR) Najayo-Mujeres.
“Ella anunció de que no quería que la defendiera, porque ella tiene su abogado que soy yo, y subimos a la Oficina de Atención Permanente y ciertamente en el acta, en el expediente se hace consignar de que ella le expresa a la secretaría que ella tiene su abogado, pero no obstante de eso, cuando está al lado del defensor público le dice, yo quiero mi abogado, mi abogado es Palermo Medina, se lo reiteró en varias ocasiones”, expresó.
Asimismo Medina Falcón sostuvo que a la imputada fue maltratada físicamente cuando era trasladada desde Baní, donde dijo que se entregó voluntariamente.
“Ha sido maltratada, le dieron golpes… ella me ha dicho, primo me han torturado, he dicho cosas que realmente, pero han sido el producto de los maltratos de los golpes que me han dado”, aseguró.
Dijo que el Ministerio Público ha actuado de forma irresponsable y han sido unos “ineptos” y que además la imputada no estuvo asistida por un abogado al momento de ser interrogada.
Mientras que la madre de Falcón Alvino, Fautin Alvino Cuevas, aseguró que su hija no podría cometer un crimen como el que se le imputa.
“Mi hija no da para eso”, acotó al ser abordada por los periodistas en el Palacio de Justicia de Ciudad Nueva.
De su lado, el exbanquero Luis Álvarez Renta, cuñado de la occisa, durante una rueda de prensa, afirmó que el crimen no tuvo nada que ver con la familia y que están sorprendidos del hecho, ya que Falcón Alvino y García se llevaban bien.
“Esto fue un crimen doméstico no tuvo nada que ver con la familia, no tuvo nada que ver con ninguno de nosotros ni con su familia directa, una cosa muy desafortunada, un crimen de una señora que trabaja con ella, hasta donde nosotros entendemos se llevan bien”, indicó.
Asimismo dijo que el día del suceso, el hijastro de la occisa había llegado del país y que Falcón Alvino preparó la comida, la sirvió y se fue más temprano como era de costumbre los viernes.
“Ese día llegó el joven, la señora que mató a Cristina le preparó la comida a todos, les sirvió la comida, ella se iba temprano porque nosotros tenemos al costumbre de que los viernes temprano le permitimos a todo nuestro personal que se vallan para que disfruten su fin de semana, ella se fue temprano, entonces regresó, de acuerdo lo que condesó y ahí se cometió el crimen”, apuntó Álvarez Renta.
Añadió que el esposo de a imputada, el prófugo Juan Gabriel Germán Cabrera, alias La Gaviota, de 24 años a quien se le acusa de ser cómplice, no acostumbraba a ir al apartamento de García, pero había ido en pocas ocasiones.
Ayer, Rosalba Ramos, procuradora fiscal titular del Distrito Nacional, dijo, que de acuerdo a las investigaciones, Falcón Alvino gozaba de la confianza de la familia pues tenía un año trabajando para ellos y planificó, en conjunto con su pareja, robarse el referido monto de dinero.
Para ello Germán Cabrera, alias La Gaviota se haría pasar como mensajero para llevarse el dinero y algunas prendas, ya que Falcón Alvino, no podía sacar nada de la torre de apartamentos por política del mismo.
La magistrada dijo que el plan consistía en que Falcón Alvino iba a poner todo en un lugar, donde Germán Cabrera se iba a ser pasar por mensajero e iba a recoger el dinero para que en las cámaras de seguridad no se captara nada, sin embargo, la torre cuenta con buena seguridad y al no permitirse que el Germán Cabrera tuviera acceso a la vivienda, la empleada doméstica se devolvió.
Afirmó que es ahí cuando la occisa se dio cuenta de que el dinero, un chuchillo y un abrigo de su esposo estaban en la parte de afuera del apartamento y al subir, le reclamaba a Falcón Alvino y ésta le da muerte con múltiples estocadas.