La soberbia, orgullo, arrogancia y altivez es uno de los pecados mas mencionados en la Biblia que tantos citan pero casi nadie lee, como sinónimos es un pecado capital, lo contrario es la humildad y el reconocimiento de nuestras limitaciones, porque a fin de cuentas ninguno de nosotros es infalible ni posee la verdad absoluta, a pesar de que son tantos los que suponen tener el total del conocimiento y desprecian las opiniones de los demás que pareciera estamos rodeados de dioses andantes.
Ya lo decía hace poco el mismo Papa Francisco, ¨la soberbia es la semilla de todos los conflictos¨ pues según el, ¨la justicia que nos trae Jesús es superior a la de los escribas y fariseos, al ojo por ojo y diente por diente¨, estos son ejemplos paradigmáticos de quienes creían tenían esa verdad absoluta que poseen los soberbios y por eso rechazaron al Salvador del mundo.
Pareciera que a algunos miembros del Tribunal Superior Electoral de la República Dominicana los asaltó el pecado de la soberbia y el orgullo, cuando el Tribunal Constitucional les reenvió una sentencia que habían dictado en contra de una convocatoria de un organismo del Partido Revolucionario Dominicano, y para demostrar que ellos son los ¨matatanes¨ en los temas electorales, se inventaron una salida que ha creado un conflicto a lo interno de ese tribunal.
Nos imaginamos que los miembros del TSE se consideran en serio que son una ¨alta corte¨ y que por lo tanto nunca se equivocan, que nadie tiene derecho ni existen recursos para echar hacia atrás una sola de sus decisiones, y esto es lo que explica una ¨barrabasada¨ como la que uno de ellos mismos describió en las motivaciones de un voto disidente, que tendrá que ser analizado de nuevo por el Tribunal Constitucional.
Lo primero es que el TSE quiere negar una verdad que es mas que evidente para todo el que vive en la República Dominicana, el PRD se dividió en dos hace ya varios años, yéndose una parte a integrar el Partido Revolucionario Moderno y la otra parte la encabeza Miguel Vargas, a pesar de que un grupito de revoltosos ha querido hacerle la vida imposible y este prevalecerá en cualquiera de los escenarios que se presenten.
Es decir, dar ganancia de causa a un grupito de personas sin ningún tipo de trascendencia política y social, pero que ademas hace tiempo coinciden con los adversarios del mismo PRD, es una torpeza de marca mayor y un signo de que lo que nubla la razón de algunos miembros del TSE son situaciones que probablemente son personales o de otra naturaleza pero que nada tiene que ver con la justicia electoral ni nada parecido.
Lo segundo es que pareciera que a algunos miembros del TSE les dolió que el TC les enmendara la plana con una sentencia que dictaron en contra del PRD donde se pedía la nulidad de una reunión de un organismo de ese partido, según ellos por no haber sido convocada de forma regular, y se consideró que se habían violado derechos fundamentales y por lo tanto se la echaron hacia atras.
Pues para demostrarles a los jueces del TC que ¨ellos son los que mas saben¨, ¨los papaupas¨ en temas electorales, la soberbia parece haber llevado a algunos jueces del TSE al borde o quizás un poco mas allá, a lanzarse en el abismo de la ilegalidad y a cometer una falta muy grave que en forma lamentable provocará lo que ya se venia advirtiendo en algunas de sus decisiones, una desconfianza absoluta en su sano juicio.
Esto no lo decimos nosotros, nuestra afirmación se basa en algunos de los párrafos del voto disidente el juez de ese tribunal Julio Cesar Madera, quien incluso hace acusaciones muy graves a algunos de sus compañeros, cuando sobre la sentencia dice lo siguiente:
¨Es ilegal, ilegitima, arbitraria, dolosa e injusta¨ y agrega ¨fue adoptada tomando en consideración un documento fraudulento, falso, distinto al verdadero, engañoso, apócrifo, sin sello, sin firma, que se refiere a una actividad diferente, es decir, a un presunto listado de concurrentes irregular de una supuesta asamblea¨.
Tantos adjetivos calificativos para una acción a todas luces marcada por la soberbia y el ¨orgullo herido¨ de algunos que creen saberlo todo y que como son jueces de una supuesta ¨alta corte¨ nadie tiene derecho a enmendarles los errores que como seres humanos pueden cometer, es decir, los señores jueces del TSE de declaran infalibles ante el TC y según uno de los mismos jueces de ese tribunal se inventaron un documento para justificar un fallo.
Para demostrarlo solo hay que definir los términos que usa el Juez Madera en su voto disidente y que son acusaciones muy graves, algunas pueden incluso ser delictuosas, veamos primero los calificativos del documento en que basaron su decisión:
Falso: ¨Que es contrario a la verdad por error o malicia¨.
Fraudulento: ¨Que implica o conlleva fraude¨
Engañoso: ¨Que engaña o induce a engaño¨
Apócrifo: ¨Que no es autentico o no es obra de la persona a la que se atribuye¨.
Todas unas lindezas que de ser ciertas en verdad merecen ser consideradas como una falta muy grave de parte de los jueces, si es que fundamentaron su decisión en un documento de estas características,. Suponemos que el Juez Madera tuvo acceso igual que todos al documento en cuestión y pudo ver que no tenia sello ni firma por lo que era apócrifo sin mas averiguaciones.
Pero ademas de todos estos calificativos al documento, donde hay adjetivos calificativos muy serios y que comprometen gravemente la responsabilidad de estos jueces, es en la posición del juez Madera sobre la misma sentencia, a la que califica de:
Ilegal: ¨Que no está permitido por la ley¨.
Ilegitima: ¨Que no ha sido establecido de acuerdo con la ley y el derecho¨
Arbitraria: ¨Que depende solamente del capricho o la voluntad de una o varias personas, y no obedece a principios dictados por la razón, la lógica o las leyes¨.
Injusta: ¨Que no es justo o no obra con justicia¨
Y dejamos el calificativo de ¨dolosa¨ dado por el juez Madera a la sentencia del TSE, porque el dolo en derecho es un delito que se define como: ¨La voluntad deliberada de cometer un delito, a sabiendas de su carácter delictivo y del daño que puede causar¨.
Es decir, uno de los miembros del TSE acusa a sus miembros de confabularse para cometer a sabiendas un engaño o fraude que fue realizado en forma maliciosa con la intención clara de hacer dañar a alguien, si esto no se aclara por parte de ese tribunal colegiado simplemente el que calla otorga y tienen razón algunos cuando amenazan con desatar un juicio político sobre algunos de sus miembros.
Es decir, los señores miembros del TSE han cometido un delito llamado dolo con el objetivo de hacer prevalecer una sentencia anterior invalidada por el TC sin importarles la violación o no de la ley y el daño que estaban haciendo al nombre de la corte que dicen representar, eso no lo decimos nosotros, lo extraemos del voto disidente de uno de los jueces que en si mismo es una acusación directa sobre la motivación de la sentencia antes citada.
Y todo esto por el orgullo, la soberbia, que son considerados pecados capitales porque uno como otro fueron la causa de que Luzbel, el querubín preferido por Dios, se convirtiera en Satanás el padre de todas las mentiras y el símbolo de todo la maldad, a los miembros del TSE les cabria el mandato de bíblico de guardarnos los corazones del orgullo, ¨para no caer en la tentación y ser condenados como del diablo¨.
Esperemos a ver como termina este pulso entre una ¨alta corte¨ donde prevalece la soberbia de los que creen no equivocarse y son capaces de llegar al delito del dolo para sostener su orgullo, y la Alta Corte donde de seguro se demostrará de nuevo que violaron los derechos de uno de los implicados, para esto el mejor testigo es el Juez Julio Cesar Madera.