Residentes en el barrio 27 de febrero denunciaron este viernes que los apagones se han convertido en su dolor de cabeza de sus residentes, ya que se prolongan por espacio de hasta 8 y 10 horas.
Como consecuencia de las constantes interrupciones del servicio de energía eléctrica, los residentes del lugar se lanzaron a las calles y lanzaron decenas de escombros, quemaron neumáticos y otros objetos.
Se quejaron de que durante las protestas agentes de la Policía Nacional lanzaron bombas lacrimógenas, golpearon a jóvenes y apresaron a un adolescente de 14 años, lo que consideraron como un abuso.
A pesar de que el servicio fue restablecido luego de la manifestación, los residentes en el referido sector advirtieron que si vuelven a ser sometido a una tanda de apagones similar a esta volverán a lanzarse a las calles.