República Dominicana.-El diputado peledeista, Elpidio Báez, descartó una eventual reforma constitucional para rehabilitar al presidente Danilo Medina para que después del 2020 pueda volver a aspirar a la Presidencia de la República.
Sin embargo, el legislador, uno de los principales promotores de la reelección que Danilo Medina desmontó anoche, dejó claro que los danilistas no apoyarán a Leonel Fernández, sino que “probablemente vengamos con sangre nueva”.
“La reforma no va, pero probablemente vengamos con sangre nueva”, respondió Elpidio Báez a los periodistas que desde las afuera del comando de campaña ubicado en la avenida Sarasota, esperaron durante una hora por la decisión de la corriente danilista, descartada anoche la repostulación del presidente Medina.
Previo al encuentro con sus compañeros legisladores y cercanos colaboradores del mandatario, Elpidio Báez dijo que los que en algún momento ofendieron y a tacaron al presidente, e inclusive le llamaron dictador, tendrán que recoger sus palabras y llamarle demócrata.
“Los que le llamaron inclusive dictador tendrán que recoger sus palabras y comenzar a enamorarlo, entonces ahora ya no le dirán dictador, sino que le dirán demócrata”.
Entrevistado por el equipo de enTelevisión, el legislador respondió que lo más interesante del discurso del presidente Medina es que actuó como El Sabio Salomón, para preservar la unidad del partido.
“Y la unidad de la organización es la piedra angular para él mantener al Partido de la Liberación Dominicana en el Poder. De modo que aunque el presidente se refirió a actitudes enojosas, fue que se le abrió a lo interno del partido una campaña terrible de descredito y ataques, sin él haber dicho públicamente que se iba a presentar para un nuevo mandato y eso lógicamente le dolió mucho”.
Asimismo dijo que el jefe de Estado también está apostando y ha apostado a la renovación del PLD y que por eso en su discurso habló de sangre nueva.
“De todos modos, el tema de la unidad pesó mucho en el presidente Danilo Medina para él tomar la decisión que tomó (…) La unidad de su partido pesó mucho, porque el lógicamente no iba a imponer una candidatura por encima del interés institucional del partido, como es mantenerlo unificado”, dijo, al tiempo de reconocer que había un alto riesgo de que de generarse una reforma constitucional y asumir el presidente la candidatura, había un sector que estaba decidido a abandonar la organización.