SANTO DOMINGO.-El ministro de Salud, Rafael Sánchez Cárdenas, sostuvo este martes un encuentro con el embajador de la República Popular China en el país Zhan Run, con el objetivo de valorar las medidas preventivas que ejecutan ambos países para evitar la propagación del coronavirus.
El titular de Salud expresó que la República Dominicana comenzó las labores de triage en los puntos de entrada al país, con el propósito de dar respuesta a casos sospechosos del virus, asimismo dijo que están disponibles unos 300 kits para la detección oportuna de febriles (Praimers).
Manifestó que el organismo de salud dominicano trabaja en la adquisición de equipos y la contratación de personal adicional para la vigilancia en puertos, aeropuertos y zonas fronterizas terrestres siendo los puntos claves para reforzar la prevención.
se desarrollan en coordinación con la Organización Panamericana de la Salud OPS/OMS con quienes se trabaja además en la conclusión de un plan de acción para el manejo de casos sospechosos de coronavirus a ejecutarse en el país en caso de tener presencia de dicho virus.
De su lado el embajador Zhan Run consideró que estas medidas de prevención traen la tranquilidad al país, al tiempo que resaltó la disposición de mantener estrecho contacto con el Gobierno dominicano y las autoridades sanitarias del sistema de Salud.
El diplomático indicó que la República Popular China todavía no cuenta con una vacuna para contrarrestar el virus, pero que ese país continúa avanzando en desarrollo de técnicas de soporte y que gracias a ellas varios pacientes están saliendo de los hospitales, luego de superar la enfermedad.
´´Gracias a estas técnicas se ha logrado bajar el número de casos sospechosos, es decir de contagio. Tenemos la información de que una señora de 87 años que dio positivo a la enfermedad, fue dada de alta tomando en cuenta que la edad promedio de quienes han muerto es de 70 años´´, manifestó Zhan Run.
Explicó que hasta el momento se han presentado 4,600 casos positivos a coronavirus, pero la novedad es que ha bajado los casos sospechosos en un 28 por ciento porque se ha elevado la capacidad de respuesta, a esto se suma la construcción de un hospital con 10 mil camas para atender estos pacientes y la llegada de unos 6 mil médicos y contingentes militares a Wuhan.