Lo único que están demostrando las acciones del grupo de renegados del peledeísmo, es que la hipocresía ha sido la marca de fabrica de su supuesta defensa de la constitución y las leyes, ya que no les ha importado después de su derrota a lo interno del Partido de la Liberación Dominicana, incumplir el mandato de la ley de partidos, comprar una franquicia y cometer todo tipo de irregularidades para regularizar la compra y ahora hasta azuzar a la propia Junta Central Electoral a que viole la ley.
Durante meses escuchamos sin cesar la ¨cantaleta¨ de que ¨a favor de la Constitución todo y en contra de la Constitución nada¨, una frase que tomada prestada a los chavistas en Venezuela por el grupo de Leonel Fernández, con la que se llegó hasta el extremo de cercar el congreso de la República con un grupo de ¨motorizados¨ que eran contratados en las estaciones de motoconcho de la capital y se vio a un ex-presidente encaramado en una patana desafiando la autoridad de los que se supone eran los legisladores de su partido.
Todo esto se hizo mientras se impedían las reuniones del comité político del partido de gobierno con una actitud chantajista, se amenaza directamente a los legisladores su cumplían con su deber de legislar, se enviaban diputados como fuerza de choque a las puertas del congreso junto con una turba vociferante, es decir, se planteó ante la evidencia de estar en minoría una confrontación, que si no es por la decencia y prudencia del Presidente Danilo Medina, pudo terminar en una desgracia en una de las cámaras legislativas.
En este punto no se defendió la constitución en el sentido de que ella misma dice cómo debe modificarse, y solamente había que permitir la reunión de los legisladores si es que se se presentaba un proyecto de modificación y contar los votos, eso se hace en cualquier del mundo civilizado pero no en la República Dominicana, donde no tenemos capacidad de conceptualizar y los demás, que no sea el ex presidente del PLD, tampoco tenemos algún tipo mínimo de conocimiento para el análisis.
Se pensó que se tenía la candidatura del partido oficial en las manos y hasta se celebró anticipadamente, solo que a la hora de la verdad, el danilismo fue capaz de presentar un candidato, unirse detrás de un proyecto común e ir a las primarias abiertas en tiempo récord para derrotar de modo claro a la alianza funesta de la facción de Leonel Fernández con quienes solo tienen como objetivo llevarnos al abismo a que nos tienen acostumbrados en la historia de nuestro proyecto de democracia.
Solo que la derrota, posible en cualquier proceso competitivo, no fue aceptada y se inventaron historias de algoritmos, códigos fuentes, sistemas de cómputos, auditorías forenses, IFES, OEA, embajada de los Estados Unidos, solo con el objetivo de justificar lo injustificable, ya que no fuimos capaces de ganar en buena lid, vamos a inventarnos una excusa para dividir al partido que ha sido la plataforma para crear la República Dominicana en que vivimos, con sus problemas como todo el mundo, pero lanzada hacia el futuro, y para eso se miente descaradamente en forma reiterada.
Habría que preguntarse si los 26 mil votos a favor de Gonzalo se hubieran contado en su contra, es decir, hubiera ganado Leonel por 26 mil votos, si estuviéramos hablando de códigos fuentes, algoritmos, fraudes y esa campaña negativa funesta y reiterativa que se ha realizado en contra de la JCE y sus autoridades, simplemente porque el resultado resultó contrario al grupo que considera tenía todo ganado y estaba incluso en capacidad de llevar esta país a ¨la revolución¨ si no se le complace en su objetivo único de sacar del palacio nacional a sus compañeros de partido de toda la vida, ¨cosas veredes Sancho¨.
Pero el resultado no fue aceptado, a pesar de haber sido bautizado por firmas auditoras que certifican la pulcritud de los resultados y que no hubo problema alguno con los equipos usados por la JCE en las primarias del 06 de octubre del año pasado, pero tampoco esto se acepta simplemente porque no me beneficia, y por eso se compra el Partido de los Trabajadores Dominicanos, se falsifican las actas y se usa la influencia que se tiene en un Tribunal Superior Electoral muy cuestionado para bautizar una ilegalidad, todo bien porque me beneficia piensa el profesor.
Para complacerlos incluso la JCE se desdice a si misma y cambia el orden de los partidos en la boleta en el mes de diciembre, situación que es llevada al Tribunal Superior Administrativo y se emite una orden de echar todo para atrás lo cual por supuesto acepta el organismo comicial pues es una orden de un juez y no hay tiempo para seguir postulando en los tribunales pues las elecciones se celebran ya en menos de dos semanas, solo que como no me beneficia la aplicación de la sentencia también se opone y hasta amenazan de nuevo con un levantamiento.
La ley 33-18 de partidos políticos es clara en el sentido de que quienes participaron y perdieron en las elecciones primarias de los partidos políticos que se acogieron a esta metodología no pueden ser candidatos, esa fue la regla que se aceptó antes de ir a esas elecciones internas para evitar el llamado transfuguismo, solo que como ahora no le conviene al profesor la aplicación de la ley, pues no solo se plantea violarla el mismo en primera persona, sino que apoya la inscripción de 176 tránsfugas y se aferra a que se sometió un recurso tardío en contra de esas candidaturas, en este caso porque no me conviene no le hago caso a la constitución y las leyes.
Este es un rosario de incongruencias que nos da mucha pena recoger a los que en su momento, como quien escribe, pensó que el proyecto colectivo por el que luchamos durante décadas estaba por encima del ego y el aire de superioridad que ahora surge desde dentro de algunos que parece lo tenían bien guardado dentro de su ser interno, muy complicados estos temperamentos, esa actitud del ex-presidente es un ejercicio de egoísmo inaceptable en un país donde se supone hemos avanzado lo suficiente para saber aceptar las victorias y las derrotas sin que haya que crear una crisis que destruya lo construido por todos.
Los votos cerrarán este camino hacia el abismo al que nos quieren conducir, que dejen ya la chicanas jurídicas y los discursos altisonantes que en menos de 15 días estamos contado los votos emitidos en las elecciones municipales y serán estos números quienes dirán quien tiene la mayoría, el jueguito de usar la constitución y las leyes como argumento se terminará y bastante pronto porque ya llegó el mes.