Es un hecho que después que logremos superar la pandemia COVID-19, habrá menos riqueza en el mundo; pero de alguna manera, la humanidad será menos pobre.
Hemos aprendido a vivir con lo justo y moderar el consumo de lo superfluo; hemos aprendido a valorar la riqueza común del espíritu y a procurar juntos la medicina del cuerpo; amenazados y temerosos ante la terrible pandemia del CORONAVIRUS, nos refugiamos en el hogar, en la familia; la última línea de defensa, peleando en retirada para poder ganar esta guerra.
A partir de mañana, no se sabe cuándo ni cómo, el mundo será mucho mejor para todos.
Prevaleceremos, UNIDOS POR SIEMPRE, en la salud y en la enfermedad.
J.G.