República Dominicana. Desde el pasado primero de julio los moteles y cabañas del país volvieron a abrir sus puertas luego de más de 3 meses cerrados como parte las medidas que buscaban evitar la propagación del COVID-19.
Sin embargo, la reapertura se hace con nuevas medidas de higiene que incrementan sus costos de operaciones, pero a pesar de ello, los administradores de estos negocios garantizan que no aumentaran los precios del servicio que ofrecen.
Yovanny Ureña, de la Cabaña Costa Azul, dijo que ya están recibiendo clientes, aunque todavía de forma tímida,"esperamos que en los próximos días aumente el flujo de clientes ya que en los últimos tres meses no pudieron hacer uso de estos espacios por los riesgos de contagio del COVID-19, y eso afecto bastante los ingresos del negocio".
A decir de los administradores de las cabañas ubicadas en el Kilómetro 12 de la Avenida 30 de Mayo, en estos primeros días de su reapertura, las horas nocturnas dejaron de ser los momentos en que reciben su mayor cantidad de cliente, "antes de la pandemia, en horas de la noche era cuando mas parejas venían a los moteles".
En procura de garantizar la salud de sus clientes, los administradores dicen haber exportado equipos y contratado empresas para higienizar sus habitaciones.
Producto de la recepción que ha sufrido el sector a causa de la propagación del Coronavirus, solo el 50 por ciento de los empleados que laboran en estas empresas están trabajando actualmente.