REPÚBLICA DOMINICANA.- Frente a los rumores de que el Servicio Nacional de Salud (SNS) traspasará el Instituto Nacional del Cáncer Rosa Emilia Sánchez Pérez de Tavares (INCART) a la Liga Dominicana Contra el Cáncer, el personal médico, enfermeras, bioanalistas y pacientes mostraron su rechazo, entendiendo que significaría la privatización del hospital.
“No vamos a permitir que nos quite este hospital, este es el único centro que atiende a los pacientes de cáncer incluso sin tener dinero”, expresó Sandra Florián, representante del Colegio Médico Dominicano.
El personal que labora en el centro de salud y los pacientes entienden que de materializarse la iniciativa, la población no tendrá acceso a los servicios a bajo costo que ofrece el hospital.