El cuadro clínico del cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez continúa estable, tras una caída en su residencia que le provocó una fractura en la cadera, por lo que tuvo que ser ingresado en el Centro de Diagnóstico y Medicina Avanzada (Cedimat) el pasado viernes.
El director médico del centro de salud, Jorge Marte, informó este domingo que el arzobispo emérito de 84 años no será operado hasta que los médicos lo autoricen.
Declaró que la reparación de cadera es una cirugía importante y el paciente necesita estar en condiciones óptimas para que pueda realizarse.
Nicolás de Jesús López Rodríguez, luego de 36 años como arzobispo metropolitano de Santo Domingo, López Rodríguez se retiró en 2016 por condiciones de salud y edad.