SANTO DOMINGO.- Como un «trago amargo» calificaron algunos economistas la decisión del Banco Central de elevar la tasa de política monetaria de 6.50 a 7.25%. Sin embargo, otro estudiosos en la materia consideran que la junta monetaria tomó la medida que le permitían las circunstancias les permitía en medio del complicado contexto internacional que sigue generando la guerra entre Ucrania y Rusia.
A partir ahora la población que tiene préstamos con entidades financieras sufrirá un nuevo revés en sus bolsillos, con el incremento de la tasas de interés.
Para el economista Antonio Ciriaco es desacertada la medida del Banco Central en procura de reducir la inflación en el país.
Ante la alta inflación que registra el país fruto del alza del petróleo y de la guerra de Ucrania y Rusia, Ciriaco sugiere al Gobierno fortalecer el campo.
Sin embargo, el economista Henry Hebrard consideró prudente que el Banco Central incremente un 75% en la tasa de política monetaria.
El aumento de la tasa de política monetaria que fijó el Banco Central es el más alto desde enero de 2009 que se ubicó en 9.5% cuando se produjo la recesión financiera de los Estados Unidos.
«Ante esta situación generada por la medida del Banco Central, los economistas estiman que a final de año, fruto de la desaceleración de la economía, ésta apenas crecerá entre 4.2 a 4.5%».