SANTO DOMINGO, RD. -El gobierno tiene habilitado un plan de contingencia que incluye más de 2,000 albergues con capacidad para acoger más de 800,000 damnificados en caso de que la tormenta “Fiona”, que se proyecta hacia la República Dominicana como huracán impacte el país desde este domingo, como se tiene previsto.
Los organismos de socorro y asistencia humanitaria, así como las instituciones del ministerio de Defensa se encuentran laborando de manera ininterrumpida y los militares acuartelados ante cualquier eventualidad.
Periodistas de ACD Media visitaron y contactaron varias de esas instituciones, coordinada por el Comité de Apoyo de Emergencia (COE) desde su centro de operaciones en la plaza de la Salud, donde se observó un activo monitoreo y seguimiento del curso del fenómeno atmosférico y los operativos de previsión y contingencia.
Las autoridades de socorro prevén que los efectos de tormenta Fiona empezarán a sentirse en territorio dominicano en la madrugada de este domingo, por lo que se dispuso una aleta nacional.
De esa alerta, el COE mantiene en categoría de mayor peligro (roja) 13 provincias; ocho en amarilla, y once están en verde.
Las provincias con mayores posibilidades de ser impactadas por Fiona son Samaná, La Romana, El Seibo, San Cristóbal, San Pedro de Macorís, La Romana, María Trinidad Sánchez, Espaillat, Puerto Plata, Samaná, Hato Mayor, El Seibo y Monte Plata.
En alerta amarilla fueron declaradas Sánchez Ramírez, Azua, San José de Ocoa, Monseñor Nouel, Duarte, Peravia, Barahona, La Vega, mientras que en verde están Hermanas Mirabal, San Juan, Montecristi, Elías Piña, Independencia, Santiago Rodríguez, Valverde, Santiago, Dajabón, Bahoruco y Pedernales.
También este sábado Puerto Rico cerro sus aeropuertos y en República Dominicana se recomendó a quienes se disponían viajar este fin de semana, reprogramar sus vuelos.
Como medida de prevención, las autoridades penitenciarias y correccionales iniciaron la evacuación de reclusos de varios recintos a otras cárceles más seguras y modernas.
La medida fue autorizada por la Procuraduría General de la República que además informó que tiene como “prioridad” la preservación de las vidas de los privados de libertad y del personal de asistencia, vigilancia y seguridad de las cárceles del país.
En ese sentido, se iniciaron las inspecciones en planta física y se tomaron las medidas para garantizar el abastecimiento de alimentos, agua corriente, agua potable, combustible y demás provisiones.
La Presidencia de la República, a través de su ministro administrativo, José Ignacio Paliza garantizo que se harán todos los esfuerzos debidos “en preparación de manera preventiva y coordinación de esfuerzos posteriores para recuperar las áreas más vulnerables que podrían resultar afectadas”.
La Defensa Civil dispone de 14,000 voluntarios que se van a reforzar en la medida en que sea necesario.
Asimismo, Gobierno también realizó un levantamiento de las líneas de tendido eléctrico, el nivel de las presas, inventarios del Plan Social de la Presidencia, los Comedores Económicos, el INESPRE, Agricultura, el Servicio Nacional de Salud, el 911 y las demás instituciones.
En Puerto Rico, pese al aumento en el nivel de alerta, una vez oficializado el aviso de huracán las autoridades gubernamentales insistieron que será la acumulación de agua de lluvia la principal preocupación a lo largo de las próximas 48 horas.
Al menos seis pulgadas de lluvias se esperan para todos los rincones de Puerto Rico, con zonas que pudieran recibir hasta 20 pulgadas en los próximos tres días, particularmente a lo largo de la costa sur y el área este de la isla.