Agencias.-El escenario en Haití se agrava, en medio de una situación ya de por si complicada, con una convocatoria a huelga general de tres días.
Este lunes, la capital haitiana, Puerto Príncipe, amaneció paralizada, cuando el Frente Unido de Transportistas y Trabajadores de Haití (Futrah) y la Asociación de Propietarios y Conductores, de los más poderosos gremios de choferes de ese país, convocan a paro, en rechazo al incremento de precios de los combustibles.
En el transcurso, haitianos prendieron fuego al Ministerio de Economía y Finanzas en Gonaives, ciudad a la que no se puede entrar, porque las vías están obstaculizadas con barricadas.
Las federaciones de transporte intentan obligar al primer ministro Ariel Henry a retirar la decisión de aumentar el precio de los productos derivados del petróleo.
Con el fuego a la oficina de la Dirección Departamental de Artibonitedel Ministerio de Economía y Finanzas, todos los documentos de archivo quedaron reducidos a cenizas.
Los medi0s locales reportan que el servicio de transporte público y el comercio a gran escala están paralizados.
Cuando se cumplan los tres días de huelga convocada, los sindicatos del transporte pretenden radicalizar su lucha, llamando a protestas callejeras los días 28 y 29 de septiembre, junto a organizaciones políticas, para exigir la renuncia del primer ministro Ariel Henry.
Calma
La pasada semana el primer ministro Haitiano Ariel Henry formuló llamó a la “calma y la reconciliación” de su país, agobiado por una profunda crisis económica y social que ha derivado en violentos enfrentamientos diarios, cuyo fondo sigue siendo la lucha por el poder político en ese país.
Para el llamado a la calma, Ariel Henry aprovechó la conmemoración del 264 aniversario del nacimiento de Jean-Jacques Dessalines, el líder de la revolución haitiana que proclamó la independencia del país el 1 de enero de 1804 y se convirtió en su primer gobernante.
Henry definió a Dessalines como “un héroe inmortal que cambió el curso de la historia de la raza negra”.