Isidro Mieses, alcalde de Sabana Grande de Boyá, afirmo que es imposible que Wilkin García, alias Mantequilla, pueda retornar su dinero a los inversionistas que aun no reciben los intereses, ni tampoco el capital que colocaron en la empresa 3.14.
El sindico de Sabana dice que a el incluso lo amenazaron cuando advirtió que eso era parte de un fraude, y conminaba a la gente a no entregar su dinero porque al final saldrían perdiendo, como ha sucedido.
Lamentó el accidente donde fallecieran dos personas, tras una persecución de inversionistas al equipo de Mantequilla. "El pueblo se va a tranquilizar….La gente estaba demasiado enfocados en lo que era el progreso y las facilidades que les daban, de hecho la gente decía que primero Dios y después Mantequilla…".
Lo que empezó como el más ambicioso y prometedor proyecto de inversiones, capaz de multiplicar el dinero de sus clientes en tiempos nunca vistos en el sistema financiero dominicano, se ha transformado en una pesadilla, que de manera directa o indirecta ya provocó la muerte de dos personas y lesiones a otra.
Mientras el paradero de Wilkin García Peguero, alias Mantequilla, propietario de la denominada empresa 3.14 continúa siendo un misterio, bajo un tenso ambiente en la calle 8 del sector El Matadero, en Sabana Grande de Boyá, fueron velados los restos de su madrastra Dulce María Romero, o Malena, quien falleció la noche de miércoles durante un accidente de tránsito, en la carretera de la comunidad Ana Santana.
El accidente, en el que también murió Kelvin de Jesús Felipe Reyes, empleado de Mantequilla y el padre de este último, se habría producido a consecuencia de una persecución por parte de inversionistas que reclaman su dinero.
Pero, a diferencia de hace algunas semanas, quienes con algarabía y júbilo proclamaban a Mantequilla como el segundo después de Dios, hoy se niegan a conversar sobre el negocio y sus inversiones.
Así es como la vida del hombre que multiplicaba el dinero de sus clientes, ha pasado de popularidad y la opulencia, a la clandestinidad y las presiones que recibe de parte de quienes depositaron en él su capital y confianza.
Pese al disgusto, que llevó a moradores en Sabana Grande de Boyá en Monte Plata a quemar neumáticos en forma de protesta frente a la villa propiedad de Mantequilla, aún no pesa ninguna querella en su contra.