REDACCIÓN INTERNACIONAL.- Estados Unidos cree que la explosión que el martes causó la muerte de dos personas en territorio polaco se debió al impacto de un misil antiaéreo procedente de Ucrania. El presidente Joe Biden ha transmitido esas conclusiones preliminares a sus socios del G-7 y la OTAN, según informa la agencia Reuters citando fuentes de la Alianza Atlántica. Anteriormente, Associated Press había apuntado a esa misma hipótesis tras consultar varias fuentes de la Administración estadounidense.
El presidente Biden no ha confirmado públicamente esas conclusiones, pero sí ha señalado este miércoles en la cumbre del G-20 en Bali que considera “improbable” que el misil que impactó en territorio polaco cerca de la frontera con Ucrania fuera disparado desde Rusia. Preguntado acerca de las alegaciones que vinculaban a Moscú con el ataque, el mandatario dijo: “Hay información preliminar que cuestiona eso. No quiero afirmarlo antes de que completemos una investigación, pero es improbable a la vista de las líneas de la trayectoria que fuera disparado desde Rusia”.
Biden hizo sus comentarios después de una reunión de urgencia para abordar el asunto con los líderes de países de la OTAN presentes en el G-20 —Polonia es miembro de la Alianza Atlántica—, el primer ministro de Japón y representantes de la UE. A la convocatoria, promovida por Estados Unidos, acudieron los mandatarios de Alemania, Francia, el Reino Unido, Italia, España, Canadá y Países Bajos.
El impacto en territorio polaco se produjo en unos compases bélicos marcados por una ofensiva rusa llevada a cabo con decenas de misiles. El intento fallido de interceptar uno de ellos sería la causa de la explosión en Polonia, según la reconstrucción estadounidense.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, confirmó que Washington ha compartido resultados preliminares de la investigación. No entró en detalles, y exhortó a mantener la prudencia. El canciller alemán, Olaf Scholz, también se pronunció invitando a evitar “conclusiones apresuradas”.
“Hemos acordado apoyar la investigación polaca sobre la explosión. Ellos se asegurarán de que sepamos exactamente qué pasó, y luego determinaremos colectivamente nuestro siguiente paso. Hubo unanimidad total entre los presentes en la mesa”, aseguró Biden en sus declaraciones.
Un comunicado conjunto de los países reunidos reflejó ese consenso y calificó de “bárbaros” los ataques con misiles lanzados el martes por las fuerzas rusas contra ciudades e infraestructuras civiles de Ucrania.
Fuentes de la Casa Blanca aclararon posteriormente que Washington respaldará la investigación polaca, pero no necesariamente sus conclusiones. Todo el tono de las reacciones apunta a una doble intención: mostrar una unidad inquebrantable y transmitir calma con la intención de evitar una escalada, objetivo cuidado por los aliados OTAN desde el inicio de la invasión rusa.