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Los Angeles.- Al menos así esperan que sucedan en el 2023 algunos equipos en las Grandes Ligas, para los que el 2022 estará lejos de sus recuerdos favoritos del año que termina.
Ya sea porque sus refuerzos o agentes libres no funcionaron a tope, llegaron lesiones, estuvieron mal manejados o cualquiera otra razón, hay clubes que decepcionaron con respecto a las expectativas que se tenían al comenzar la temporada que hace poco menos de dos meses coronaron los Houston Astros, que por cierto cumplieron con los pronósticos, como uno de los favoritos.
A continuación los cinco equipos que más decepcionaron en la Gran Carpa durante el 2022, aunque para algunos ya sea crónico….
5.- DETROIT TIGERS
Los Tigers se reforzaron como nunca en años recientes en pitcheo, bateo y defensa. Pero la única noticia positiva fue que Miguel Cabrera llegara a los 507 jonrones en su carrera ligamayorista.
Detroit había terminado el 2021 en ritmo, con marca de 77-85 y terceros en la División Central de la Liga Americana en su primer año bajo el mando del manager A.J. Hinch, antes de firmar al pitcher abridor Eduardo Rodríguez y al relevista Andrew Chafin.
Eso sin contar a los All-Stars Javier Báez y Austin Meadows, quienes llegaron para fortalecer defensa y ofensa, además del receptor Tucker Barnhardt.
Pero al final el resultado fue peor en el 2022 que el año anterior; 66 ganados, 96 perdidos y cuartos en su división. Fuera de playoffs por octavo año consecutivo.
Quizá los Angels nunca dejan de sorprender, menos cuando tienen un roster que en el papel parece poderoso y debería competir con el que sea, además de una nómina de las más costosas en Grandes Ligas.
Pero siempre hay alguna novedad con el equipo que fue a postemporada por última vez en el 2014, a pesar de que en el 2022 llegó con dos de los mejores peloteros de todo el béisbol, el lanzador Shohei Ohtani y el jardinero Mike Trout.
A pesar de todo, los Angels terminaron 24 entre 30 equipos en promedio de bateo; 25 en carreras producidas. Así será complicado ganar partidos de béisbol, aunque el pitcheo sea decente; novenos en efectividad en las Grandes Ligas.
Los Angels (73-89) de nuevo fueron una de las 10 nóminas más altas de las Mayores, superior a los $169 millones de dólares y apenas les alcanzó para ser cuartos en la División Oeste de la Liga Americana.
Los aficionados de los White Sox tal vez ya se están acostumbrando a ser una de las decepciones de todas Grandes Ligas, donde cada temporada aparecen con una nómina en el papel que parece lista para conquistar la División Central de la Liga Americana y trascender en playoffs.
Pero con dos de sus mejores lanzadores viviendo una pesadilla de temporada, Lance Lynn y Lucas Giolito; el año de menor producción de su perene candidato a Jugador Más Valioso, José Abreu y la baja de juego de sus compatriotas cubanos Yasmani Grandal y Yoan Moncada, terminaron con récord de .500 (81-81) fuera de una postemporada expandida…
Las leisones de Tim Anderson, Eloy Jiménez y Luis Robert tampoco ayudaron.
Pero sobre todo, los White Sox vieron el declive que parece definitivo en la carrera como manager de Tony La Russa, cuyas decisiones en varios aspectos fueron muy cuestionables e incluso no pudo terminar la temporada por razones de salud.
Los Giants comenzaron el 2022 como uno de los favoritos para ganar todo, después de su temporada de 107 victorias el año anterior. Pero ni siquiera alcanzaron los playoffs.
Tuvo que ver el retiro de Buster Posey. Pero más todavía la baja en la productividad de los veteranos Brandon Belt y Brandon Crawford.
También por supuesto el bajón en su pitcheo abridor y de relevo con respecto al 2021. Pero más todavía el mal desempeño que tuvieron dentro de su propia división contra dos de los clubes que más gastan en nómina en todo el béisbol.
San Francisco terminó con marca de 5-15 contra Los Ángeles Dodgers y 6-12 contra los San Diego Padres en temporada regular.
Peor aún para un equipo con expectativas de Serie Mundial, los Giants se fueron al cuarto sitio divisional con una pobre marca de .500, después de una patética segunda mitad de temporada.
Para los Dodgers, era ganar el título o decepción total. Y sucedió lo segundo. Fueron eliminados en la serie divisional de postemporada, después de ganar 111 partidos; es decir superar los 100 triunfos por tercera temporada consecutiva y poner récord de victorias en la historia de la franquicia.
Ni siquiera alcanzaron la Serie de Campeonato de la Liga Nacional, luego de alargar su monopolio divisional, donde se coronaron casi desde principio de septiembre y por novena ocasión en los últimos 10 años…
Peor aún, las esperanzas de Serie Mundial se fueron lejos contra los San Diego Padres, equipo al que han mantenido bajo control durante más de una década en campaña regular dentro de su misma división.
La decepción es todavía más grande cuando su nómina, la más cara de todo el béisbol, y tal vez la más en cualquier deporte profesional llega casi a $270 millones de dólares, con un equipo que comenzó parecido a un Dream Team, repletó de All-Stars en el campo y colección de candidatos a Cy Youngs en su staff de pitcheo.
