Puerto Príncipe, Haití. – El primer ministro de Haití, Ariel Henry, anunció que esta semana quedará instalado el Alto Consejo de Transición (HCT), «un compromiso para una transición inclusiva y unas elecciones transparentes».
«Tendremos que instalarlos oficialmente esta semana y darles los medios para que empiecen a trabajar codo con codo con el Gobierno», dijo Henry al referirse a que el organismo quedará conformado por tres personas.
El jefe de Gabinete agregó que la creación del HCT quedó establecida durante la reunión del Consejo de Ministros, celebrada la víspera.
«Por fin hemos podido cerrar el año 2022 con la firma de un compromiso nacional para una transición inclusiva y unas elecciones transparentes», declaró el máximo responsable de la nación, quien asumió el cargo en julio de 2021, semanas después del asesinato del presidente Jovenel Moise, el 7 de ese mes.
En ese sentido, anunció que emitirá un decreto en el que se crea el Alto Consejo de la Transición, el cual se publicará en el diario oficial Le Monitel con los nombres de las tres personas que lo dirigirán.
«Estamos avanzando con los que quieren hacerlo. Otros vendrán y se unirán a nosotros, les daremos espacio», dijo Henry, para afirmar que en 2023 «debemos aprender a confiar los unos en los otros».
Solicitó al pueblo haitiano que le tome la palabra cuando asegura la voluntad de su Gobierno de hacer todo lo posible para reconstruir las instituciones democráticas.
«No es con desconfianza como formamos un equipo para afrontar juntos los peligros que se ciernen sobre nuestra patria común», expresó Henry, sugiriendo que «todos los verdaderos demócratas» deberían aprovechar la oportunidad para sumarse al consenso nacional.
Esto, con el fin de «contribuir» junto con el Gobierno a la definición de la hoja de ruta que incluirá las estrategias y acciones a implementar para la organización de las próximas elecciones.
A finales de este enero, Haití dejará de tener funcionarios elegidos con el fin del mandato de los 10 senadores cuyo período vence en este mes, mientras que las condiciones parecen lejanas de cumplirse en el país para la celebración de elecciones generales.
Haití ha vivido una crisis humanitaria sin precedentes marcada por un terrible empeoramiento del clima de inseguridad, con más de 1.000 secuestros, el resurgimiento del cólera, que ya ha matado a más de 350 personas, la persistente escasez de combustible, cientos de muertos en guerras entre bandas, matanzas, violaciones y asesinatos repetidos.