República Dominicana tiene un gran desafío con la seguridad alimentaria y la accesibilidad a productos básicos, así lo advirtió la a Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO, por sus siglas en inglés) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA), organismos que además manifestaron preocupación ante el bajo índice nutricional de los alimentos que consume la mayoría de dominicanos.
El representante de la FAO en República Dominicana, Rodrigo Castañeda, expresó que pese a la alta productividad del país, respecto a los alimentos de mayor consumo, la población no cuenta con los recursos necesarios para acceder a los mismos, debido a su alto costo.
Con él coincide, la representante del Programa Mundial de Alimentos, Gabriela Alvarado, quien al igual que Castañeda urgió la necesidad de la revisión de la cadena de precios, así como la modificación de la Ley de Seguridad Alimentarias.
Otra preocupación de los representantes de los organismos internacionales son los malos hábitos alimenticios de los dominicanos, lo que incide en la alta tasa de obesidad y otras enfermedades crónicas relacionadas con la alimentación.
A fin de combatir estos males, la Presidencia de la República lanzó el Plan Nacional para la Soberanía y Seguridad Alimentaria y Nutricional 2023-2026.
Al ofrecer el discurso central, el ministro de la Presidencia, Joel Santos Echavarría, expresó que el alcance de este plan nacional, está centrado en la adopción de nuevos enfoques y la incorporación de soluciones integrales e innovadoras, para hacer más sostenible el sistema alimentario nacional y, con ello, estimular también la existencia de un ambiente de seguridad alimentaria y nutricional acorde con las expectativas ciudadanas.
El funcionario indicó que, la elaboración de este Plan Nacional SSAN 2023-2026 ha sido conducido por el equipo directivo y técnico de las instituciones que integran el Conassan, liderado y coordinado de manera conjunta desde la Secretaría Técnica para la Soberanía y Seguridad Alimentaria y Nutricional (Setessan).
Para esta labor también se contó con la asesoría técnica de la Organización de las FAO y el PMA.
Santos Echavarría, precisó que el plan presenta una estructura programática compuesta por cinco componentes: Gobernanza, Disponibilidad de Alimentos, Acceso, Alimentación y Nutrición, Cambio Climático y Gestión de Riesgos. Cada componente cuenta con ejes de intervención y líneas de acción.
“La elaboración de este plan es ejemplo de un enfoque abierto y participativo, en el que se consultó a expertos, técnicos y representantes de las organizaciones de productores, comerciantes y consumidores de alimentos”, puntualizó.