SANTO DOMINGO.– En medio de conflictos con agentes de la Policía Nacional tras prohibirles el uso de piscinas inflables, residentes del sector de Villa María en el Distrito Nacional aseguran que ante la falta de agua potable buscaron alternativas para llenarlas y “refrescarse” con un chapuzón por lo que rechazaron la disposición.
El incidente se originó cuando los agentes llegaron a este barrio indicándole a los residentes que debían quitar las piscinas que tenían colocadas en las aceras frente a sus viviendas.
De inmediato la decisión generó malestar entre los moradores quienes dicen que hicieron colectas en grupos para comprar camiones de agua.
El panorama era similar en la poza del barrio La Zurza, donde los moradores aprovecharon para darse un chapuzón en este viernes Santo.
Las calles de sectores como Villa Juana, Villa Consuelo, Ensanche la Fé se observaban con poco flujo vehicular y la mayoría de los negocios permanecían cerrados.
Aunque los comerciantes insisten en que la prohibición a la venta de bebidas alcohólicas durante este Viernes Santo le generará pérdidas en sus negocios, aseguran que acatarán la disposición.
Residentes aseguran que debido a la situación económica este año no pudieron realizar las tradicionales habichuelas con dulce.