Convencidos de que la virgen de la Altagracia es poderosa y misericordiosa, ciudadanos narran sus milagros

La Altagracia- Aunque para practicantes de religiones protestantes se trata de un simple ídolo, para los católicos la virgen de la Altagracia es la madre protectora del pueblo dominicano y cada año le rinden culto, a través de diversas manifestaciones.

A propósito de conmemorarse este domingo el Dia de Nuestra Señora de la Altagracia, miles de feligreses viajaron desde todos los puntos del país, hasta la Basílica de Higüey para dar gracias por algún milagro recibido, pedir favores o cumplir promesas.

Convencidos de que la virgen de la Altagracia, advocación de María la madre de Dios, es poderosa y misericordiosa, muchos narran sus milagros y aseguran deberle incluso la vida.

La señora Elva Rodríguez, oriunda de Santiago, lleva 37 años ininterrumpidos viajando hasta la Basílica, en agradecimiento por la salud de su hijo, quien desde pocos días de nacido se congestionaba.

Elva Rodríguez asegura que fue la propia virgen, encarnada en una anciana, quien le dio el remedio para curar a su hijo, mismo que ha utilizado para devolver la salud a otros.

“Ella una señora chiquita vestida de blanco, entonces yo estaba en el salón y mi hija fue a buscarme que mi hijo estaba apretado, él se me apretaba mensual, semana y después todos los días”, cuenta.

Agrega que “Esa señora venía de paro así en la puerta del salón y me dijo, doña que tiene su hijo, entonces yo le dije a ella lo que estaba pasando y ella me dijo yo le voy a dar un remedio, ¿ a ti no se le olvida?, y yo le dije, no pero a mi todo se me olvidaba, pero eso no se me olvidó, la señora de desapareció, no cogió ni para acá, ni para a allá y yo me engranojé”, afirma la señora Rodríguez.

Como Elva Rodríguez, otros feligreses afirman deber la salud propia o la de su familia a la virgen de la Altagracia.

“El milagro que la virgen me hizo fue que yo tenía un hijo que sufría de la garganta y se lo recomendé a la virgen a manera de una promesa y gracias al señor y a la virgen de la Altagracia de sanó hace como 4 años”, cuenta Pura Muñoz, quien llegó desde Yamasá, cargando con ella un galón con agua para que se la bendijeran y utilizar sus poderes curativos en favor de quien los necesite.

Pero no solo favores judiciales ha concedido Nuestra Señora de la Altagracia a sus fieles, sino también de tipo judicial.

De acuerdo a su testimonio, la virgen ayudó a Melkys Rosario a resultar ganadora en una litis judicial con su ex pareja.

“Yo tenía un caso de justicia de separación de bienes en la justicia con el padre de hijo y le juré que si yo ganaba el caso, iba a venir mientras vida tenga”, afirma Melkys Rosario.

Pero a la Basílica de Higüey, llegan muchos, en busca de otro tipos de favores y no precisamente de parte de la virgen.

Cientos de pedigüeños también se dieron cita, a fin de despertar en los creyentes su lado caritativo y conseguir alguna limosna.

Mientras, en él área verde de los terrenos que alojan al templo, cientos acampaban en casas de campaña, donde también pasaron la noche.

Y es que los que viven en provincias lejanas, llegan incluso dos días antes de la conmemoración religiosa.