Agencias.-Este lunes, algunas zonas de Laboule y Thomassin, barrios acomodados de Puerto Príncipe, fueron atacados por las bandas armadas, que dispararon contra casas y comercios.
La residencia de Pierre Volmar Demesyeux, consejero del Tribunal de Cuentas en Laboule 18, no fue la excepción, y el funcionario salvó su vida gracias a la intervención de la seguridad de su casa.
En tanto, en una nota publicada este lunes, la empresa pública de electricidad Electricite d’Haiti subrayó que no se había librado de los actos de vandalismo y terror de los bandidos.
"Tales actos de robo y sabotaje sólo sirven para agravar aún más la situación financiera y técnica de la empresa", denuncia la institución, que señala que cuatro subestaciones de la zona metropolitana de la capital, así como la central de Varreux, han quedado destruidas y totalmente disfuncionales.
Esta situación significa que decenas de zonas no pueden abastecerse de electricidad como de costumbre, afirma la empresa, que hace un llamamiento a las autoridades para que garanticen la seguridad de sus numerosos emplazamientos en todo el país.
Asimismo, la empresa denuncia que los maleantes se llevaron documentos importantes, instalaciones eléctricas, cables, inversores, baterías y material informático y de oficina.
En otra nota, la embajada de Francia en Haití anunció que, como medida de prevención, permanecerá cerrada al público hasta el viernes 22.
El Gobierno de Haití prorrogó de nuevo este domingo, hasta el miércoles, el toque de queda que rige en el departamento de Oeste, donde está la capital, Puerto Príncipe, también bajo estado de emergencia ante los elevados niveles de violencia que se registran.